El salón de plenos del Ayuntamiento de Elche acogió ayer, como cada 13 de agosto, la que suele ser la única y pública reunión del Patronato del Misteri para dar cuenta de lo realizado en el último ejercicio y también de lo que se pretende acometer para los meses venideros. En la sesión de ayer, menos agitada que la de los dos años anteriores, en las que se pidió más transparencia, participación, democracia y la creación de una escuela de música (que no se ha creado), se puso énfasis de nuevo, dicho con otras palabras, sobre esto último, pero también sobre la necesidad de apretar el acelerador en la difusión y la divulgación de La Festa, así como de saber ubicarla y posicionarla correctamente en pleno siglo XXI sin perder un ápice de su pureza, y sin dejar de lado la cultura intrínseca que desprende.

En este sentido, Manuel Rodríguez, exalcalde de Elche, reclamó aplicar el artículo 52 de la Ley del Misteri y que el Patronato se encargue de desarrollarlo.

El citado artículo hace referencia a la salvaguarda y promoción de la lengua: «La Generalitat y el Ayuntamiento de Elche velarán por el mantenimiento de la lengua de La Festa recogida en el consueta en su pureza, así como por el mejor conocimiento de su significación histórica y cultural, en especial por parte de los miembros de la Capella y la Escolanía del Misteri».

Esta necesidad de conservar y potenciar la lengua autóctona valenciana, a juicio de Rodríguez, tiene que ver con la idea que previamente se había lanzado: reflexionar sobre la función del Misteri en una sociedad multicultural. En este sentido, el exalcalde se refirió a lo oportuno de defender el valenciano del drama asuncionista en la actual sociedad multicultural, una cuestión que, en cualquier caso, se apuntó para tratar en una próxima reunión de la junta rectora.

Directrices generales

También en el punto de determinación de las directrices generales de 2018, el patrono Rubén Pacheco, uno de los más inconformistas por cómo se llevan haciendo las cosas en el seno del Patronato, propuso como directriz para 2018 -«porque hay muchas (directrices) y no nos hemos centrado en ninguna», dijo- crear una estructura educativa acorde con el Misteri del siglo XXI, enfocada a los escolanos y a la Capella. Esta idea entronca directamente con su petición de hace justo un año cuando reclamó crear una escuela de música interna.

El presidente ejecutivo del Misteri, Fernando García, pidió «un plus de compromiso y esfuerzo», mientras que el patrono Pascual Urbán solicitó llevar a cabo «una labor de divulgación más importante de la que se está haciendo», sobre todo entre los propios ilicitanos, aunque también reseñó que era consciente de que tal vez se tratara de una cuestión económica. Urbán también alertó que las cuatro plataformas elevadas donde se ubican los medios de comunicación carecen de barandilla y que se incumplía la normativa al respecto. Luego, en ruegos y preguntas, Urbán propuso que se monten más tarde las dos tribunas en Santa María y que no se dejen puestas entre las representaciones de agosto y noviembre ya que «quitan visibilidad y unos 300 asientos».

Cuentas en equilibrio

Uno de los puntos más importantes del orden del día fue la aprobación de los presupuestos para 2018, por un importe en principio de 391.000 euros, unas cuentas en equilibrio que incluyen a priori ingresos y gastos de un día más de representación en noviembre, como el año pasado, aunque este asunto no se aprobará definitivamente hasta octubre noviembre.

«¿Fem Festa o fem espectacles?», llegó a cuestionar Manuel Rodríguez antes de que quedara claro que la aprobación de las cuentas no implicaba que se vaya a incorporar un día más de representación en noviembre de 2018.

También se solicitó que se incluyera una partida específica para restaurar el manto y otros elementos de la talla de la Virgen, algo ante lo que el secretario autonómico de Cultura, Albert Girona, indicó que el Instituto Valenciano de Conservación a buen seguro estaría encantado de atender este tipo de peticiones.

Los invisibles

La patrona Orófila Pérez pidió un reconocimiento mayor para los que trabajan en el Misteri y no dan la cara, por lo que pidió que estén también presentes en las comidas de hermandad.

Zoilo Martín, a quien se le informó que para el próximo año se destinarán 6.000 euros para formación externa de los cantores, expuso que sería necesario y relativamente fácil que se hicieran arreglos en los trajes de la Capella, así como fijar una edad de jubilación para éstos, salvo que el Mestre de Capella indique que alguna voz es imprescindible.

En ruegos y preguntas, Orófila Pérez manifestó que debería darse cuenta de a quién se invita y qué día, mientras que Pacheco fue más allá al pedir que se dé el listado de entradas que se regalan, por qué y que se haga público. A esto último sumó su deseo de conocer cuándo se va a poner en marcha la comisión de expertos en teatro medieval, liturgia y música «para que los cambios se tomen con conocimiento de causa». «Esto ¿para cuándo? porque llevamos ya varios años», indicó.