A las cinco de esta tarde muchos pequeños ya estaban calentando voces en la Casa de La Festa. Mientras sus familias, la mayoría madres y hermanos, esperaban a la entrada del inmueble, arriba, en la primera planta, los niños de la Escolanía reproducían algunos pasajes que se entonan desde los aparatos aéreos del Misteri.

Los pequeños se preparaban así para participar, a partir de las 18 horas, en una de las citas imprescindibles de los preparativos de cara a las escenificaciones, a partir de mañana, de La Festa.

El templo de Santa María, como viene ocurriendo en los últimos años, estaba prácticamente completo. De hecho, son muchos momentos de las representaciones los que, con indumentaria de calle o ensayo informal, se realizan en esta Prova de l´Angel, por lo que numerosos ilicitanos y turistas no quieren perderse este avance del Misteri.

Mientras los pequeños se turnaban en el Cadafal, accediendo y saliendo de la Magrana y del Araceli, lo que lleva su tiempo por motivos de seguridad, y para que no se generen tiempos muertos, de cara al público se aprovecha para entonar distintos pasajes del drama asuncionista.

La Capella ha tenido esta tarde que hasta casi repetir repertorio ante la tardanza en el Cielo para preparar el Araceli y la Coronación, una cuestión de menor importancia ya que de lo que se trata sobre todo es de ir preparando a los pequeños para que se acostumbren a actuar desde las alturas y ante numeroso público en años venideros.

Es en estos momentos donde lo de menos es si la voz se proyecta o si se canta entonado. Demasiado hacen los escolanos que resisten el calor, la presión, controlan los nervios y, sobre todo, cantar a varias decenas de metros.

El público ha aplaudido en varias ocasiones, sobre todo cuando se abrían y cerraban las puertas del Cielo. Los asistentes, entre los que se encontraban incluso bebés de dos meses, han podido observar por primera vez este año cómo aparecían en escena La Magrana, el Araceli y la Coronación.

Aunque se trataba de eso, de una prueba, y de una tarde en la que abundan los niños, acompañados de sus padres y abuelos, prácticamente se ha vivido casi como una representación resumida e informal, con presencia de distintas autoridades, la cohetà, parte de la Capella y momentos protagonizados por San Juan o el Ternari. La Prova de l´Angel también ha servicio para emocionar un poquito a los más devotos de La Festa.