Elche realizará por primera vez una encuesta, a lo largo de nada menos que de cuatro años, para conocer la situación del consumo de drogas entre los jóvenes ilicitanos. El Ayuntamiento carece de datos a nivel local por lo que, de forma inédita, quiere impulsar una exploración científica en este campo para conocer patrones de uso de las drogas, percepción de las mismas y otras muchas cuestiones que contribuyan a tener un marco de referencia «para detectar de forma más fiable las necesidades del municipio y, con ello, abordar acciones preventivas específicas adaptadas a los resultados de la misma».
Ésta es una de las muchas acciones que se contemplan en el nuevo Plan Municipal de Prevención Comunitaria de Conductas Adictivas, programado para el periodo 2017-2010, en el cual se advierte, además como prioridad, la necesidad de ampliar el número de profesionales en la Unidad de Prevención Comunitaria de Conductas Adictivas de Elche (UPCCA), la estabilidad de los mismos y del servicio. En concreto se propone dotar a la UPCCA de al menos dos técnicos más, según subvención, e incluir partida para este servicio en el presupuesto municipal, así como llevar a cabo acciones para visibilizar de forma continuada la existencia de esta unidad en Elche.
«Botellón»
Con respecto a la encuesta, que se trasladaría a los alumnos de los institutos, ésta se complementaría con otras técnicas cualitativas y cuantitativas, como grupos de discusión, entrevistas grupales o talleres participativos entre jóvenes de entre 12 y 18 años, sin dejar de lado el fenómeno del «botellón», asunto sobre el que también se elaboraría otro cuestionario para trasladarlo también a los alumnos del resto de centros de enseñanza.
A juicio de los promotores de este plan municipal es preciso así tener un conocimiento cuantitativo y cualitativo de la realidad específica de Elche en relació con los consumos en los jóvenes.
Este plan recoge además otra serie de actuaciones concretas, como implantar un programa de prevención universal en todos los centros educativos, es decir, en Primaria, Secundaria e incluso también en el ámbito universitario, de forma estable; así como el imperativo de hacer llegar estos programas a todos los docentes de los centros educativos.
«La escuela tiene un gran potencial preventivo como agente de salud. Como sabemos la prevención de las drogodependencias se enmarca dentro de la educación para la salud. Así, en la escuela se puede favorecer el desarrollo de actitudes y valores favorables a la salud y a la ocupación creativa del tiempo libre», según se recoge en dicho plan municipal.
Por otro lado, a juicio de los responsables de este plan hace falta un nexo de unión entre las administraciones y la UPCCA, así como una colaboración efectiva e implicación en el diseño, desarrollo y evaluación de esta hoja de ruta por parte de todas las entidades concernidas: asociaciones, ONGs, universidades, Sanidad, Educación, Policía, Juventud y Deportes, entre otras.
«Este plan quiere contribuir a desarrollar la potencialidad del municipio para mejorar la salud y el bienestar de su población tras analizar los problemas en materia de conductas adictivas en su población y sus determinantes; trabajar desde diversos enfoques y actores, la búsqueda de soluciones; contextualizar intervención en el marco de Salud Pública, entendido como el conjunto de actuaciones organizadas y dirigidas a defender, fomentar y recuperar la salud de una comunidad;e intentar responder a una sociedad civil que demanda soluciones y participación», según se indica en esta iniciativa.
El presupuesto general para los cuatro años de este plan de prevención ascendería a 629.201 euros, incluidas aportaciones de distintas administraciones además de la municipal.
