El nuevo personal que se ha incorporado a los centros de salud de Elche y Santa Pola para sustituir las vacaciones de los sanitarios no pudieron abrir ayer las historias clínicas ni hacer recetas electrónicas porque las tarjetas identificativas que les han entregado la Conselleria de Sanidad son incompatibles con el sistema informático.
Las nuevas tarjetas dan problemas porque en los centros de salud funciona el sistema Windows XP, ya en desuso, que está siendo sustituido por el Windows 7.0, lo que hace que las nuevas tarjetas no funcionen en algunos ordenadores.
El problema, que podría ser anecdótico, no es así, y se convirtió en un verdadero quebradero de cabeza para los profesionales provocando retrasos, sobre todo en el centro de salud del Pla y en el de Santa Pola. Además, pese a que se debe a un problema técnico, sí tiene cierta trascendencia porque al no poder acceder al historial clínico los nuevos médicos desconocen totalmente al paciente, con lo cual retrasa aún más las consultas al tener que dedicar más tiempo para informarse del historial clínico del enfermo, lo que crea un mayor volumen de público en los ambulatorios. Tampoco se pudieron expedir recetas electrónicas provocando el malestar del personal médico, ya de por sí con bastante presión asistencial.
Sin embargo, los sanitarios que no se han ido todavía de vacaciones sí que podían acceder con sus antiguas tarjetas al programa. Fuentes médicas del centro de salud de Santa Pola culpaban a la Conselleria de Sanidad de improvisación y descoordinación.
