Carlos no ha tirado nunca una carretilla y este será el primer año que lo haga en el recinto acotado para ello tras la Nit de l'Albà ilicitana. Será el estreno de este joven que, con 19 años, participará activamente en una tradición que siempre ha visto desde el otro lado de la valla. «El año pasado estuvieron dentro mis hermanas y algunos amigos. Me quedé con las ganas porque no tenía el permiso pero este año sí que entro».

Carlos ya ha hecho el curso que la Associació de Carretillers i Tradicions d'Elx impartió ayer en el Polivalente de Carrús para que los inscritos obtengan el carné de Consumidor Reconocido Experto (CRE), para manipular las carretillas que llenarán el recinto ubicado en el Hort del Monjo. Él, como otras 25 personas que asistieron a esta convocatoria, atendieron las explicaciones del formador Manuel Rodríguez y también a las del presidente de la asociación, Jaime Sánchez, quien, como anécdota confiesa que, a pesar del cargo, nunca ha tirado una carretilla.

Con esta nueva hornada de «graduados» en el arte de tirar carretillas, ya son más de 300 personas las que la asociación de carretilleros ha formado en Elche y que podrán acceder al recinto en la noche del 13 al 14 de agosto.

Maite también ha pasado este curso, aunque no es la primera vez que participará en las fiestas. Retoma la tradición con su padre, después de la última vez, en 2012, cuando todavía se celebraba en la calle, con menos restricciones, al final de una zona acotada en el centro.

De entre el alumnado de esta jornada, aproximadamente, la mitad eran mujeres que, como Maite, ya tienen experiencia en la técnica de la cordà o, como Carmen, que quiere quitarse el miedo a participar en la «guerra» del recinto de carretillas. «Siempre me ha llamado la atención pero al final me echaba para atrás y no participaba. Ahora, para obligarme, ya he hecho el curso y en cuanto llegue a casa eligiré la ropa que voy a usar para protegerme y la dejaré en un sitio a la vista para irme haciendo a la idea», comenta la asistente.

Gorra, gafas protectoras, un pañuelo para la cara y el cuello, camiseta interior, cobertura de vaquero y algodón, guantes de cuero y botas es la vestimenta recomendada para estos guerrilleros de las fiestas de Elche.

Entre los alumnos también habían dos técnicos del Ayuntamiento, uno de ellos un ingeniero encargado de planificar este tipo de actos en la ciudad, que han decidido empaparse de las técnicas y consejos de los expertos en este arte. Otro alumno, Jorge, reconocía que lleva toda la vida siendo la oveja negra de la familia porque era el único que no se había estrenado en la Carretillà en Elche, pero que iba a dar la sorpresa sumándose este año a sus hermanos, que aún no lo saben.

Todos estos nuevos carretilleros en potencia aprendieron, a través del formador, nociones sobre los tipos de artefactos que existen, historia de la tradición en la ciudad, y consejos para portar con el mínimo riesgo los cartuchos. También les advirtieron de la importancia de actuar conforme a las normas «porque la carretilla es como un soplete y puede herir y hacer mucho daño».