Plan de choque para mejorar la seguridad en las carreteras y reducir el número de accidentes por alcohol y drogas. La Policía Local de Elche va a redoblar este verano la presión sobre los conductores en toda la franja costera del municipio ante el notable aumento de movimientos del número de vehículos que experimentan las zonas de playa, fundamentalmente durante los meses de julio y agosto.

De forma complementaria a las habituales campañas estivales de la Dirección General de Tráfico, la Policía Local de Elche va a aumentar en un 50% el número de controles de velocidad, droga y alcohol en los principales puntos de entrada y salida a las zonas de playas, con especial incidencia en Arenales del Sol, El Altet y La Marina.

Para aumentar la presión sobre los conductores, la Policía Local va a trasladar a la Unidad de Apoyo de Operaciones y a la Unidad de Delincuencia Vial a estos puntos de incidencia, donde se intensificarán el número de controles realizados el pasado verano. Reducir el número de conductores que circulan bajo los efectos del alcohol o sustancias psicotrópicas y ejercer un efecto disuasorio sobre quienes aún se ponen al volante tras el consumo de alcohol o drogas es el objetivo final de esta campaña de refuerzo del cuerpo local de Policía.

El pasado viernes, en la víspera de San Juan, los ilicitanos que se acercaron hasta las playas de El Altet y Los Arenales para disfrutar de la noche más corta del año entre familiares y amigos ya se encontraron con varios de estos controles de alcoholemia y drogas de la Policía Local en diferentes puntos de la calzada que une las playas de ambas localidades. Este incremento en el número de controles será especialmente sensible tanto los fines de semana como durante las diferentes fiestas estivales que se celebran en el área de la franja costera, teniendo especial incidencia tanto de noche como ya de madrugada.

Las denuncias relativas a cuestiones de tráfico durante el período vacacional en estas zonas turísticas se incrementan entre un 30 y un 40 por ciento respecto al resto del año ante el importante incremento que experimenta el número de movimientos de vehículos. Este refuerzo en el control sobre las carreteras también se traslada a las propias localidades, con controles de velocidad en los viales y una mayor vigilancia en zonas de aparcamiento o de condensación del tráfico en vistas a facilitar la fluidez de la circulación. En este punto, se va a trasladar un vehículo grúa a Arenales de forma permanente para agilizar la retirada de vehículos, bien por estar mal aparcados en las zonas urbanas o porque sus conductores den positivo en alguno de los controles que se establecerán de alcoholemia y drogas en los accesos a las playas.

Importante despliegue

La Policía Local desplegará un amplio dispositivo en las carreteras de entrada a la costa para poder hacer frente a la cantidad de controles previstos. Cada control de velocidad contará con una presencia media de entre cuatro y ocho agentes, por los entre cuatro y seis policías que participarán en los de alcohol y sustancias estupefacientes.

Los agentes locales de Elche se han venido instruyendo desde finales de 2015 para poder realizar las pruebas especificas de los controles de droga, toda vez que, contrariamente a lo que sucede con las de alcohol, los policías deben estar en posesión de una formación acreditada por el Instituto Valenciano de Seguridad Pública para que las pruebas de saliva tengan validez judicial.

En este contexto, el consumo de drogas ya ha superado al de alcohol este año en las carreteras ilicitanas. El cannabis y la cocaína son las sustancias más habituales al volante, con independencia del día, mientras que los positivos por alcohol se focalizan en fin de semana.