Los arqueólogos no son buscadores de tesoros sino profesionales encargados de reconstruir la historia a partir de lo que van desentrañando de la tierra. Es la idea que más se repitió ayer durante el balance que se hizo en el yacimiento ilicitano de La Alcudia de las tres excavaciones que, desde principios de año, han realizado tres equipos de profesionales de la Universidad de Alicante (UA) en colaboración con otras instituciones académicas y privadas de otros puntos de España y Europa.

El proyecto «Damas y héroes», que dirige el catedrático en Historia Antigua de la UA José Uroz, y que trata de contextualizar una de las esculturas más reconocidas que han a parecido en los terrenos de la antigua Ilici, la Dama de Elche, ha encontrado una de esas piezas del rompecabezas que le faltan a los historiadores. En concreto, ha hallado la pata del trono de una dama muy similar a la de una escultura que se encuentra en el Museo de La Alcudia. Una pieza que, al ojo de alguien ajeno a la arqueología puede parecer insignificante, pero que, según los profesionales, tiene una gran importancia para darle más fuerza a la teoría de que la zona donde se encontró la famosa Dama de Elche -que es donde ha aparecido- era una necrópolis. El director de la Fundación Alcudia y miembro de este equipo de arqueólogos, Alejandro Ramos, explica que «la Dama entronizada que mantenemos en nuestro centro de exposiciones, que encontró mi abuelo en un área cercana en 1949, tiene unas patas muy similares a ésta que hemos descubierto. Aunque podría cuadrar perfectamente con ésta, no disponemos de un corte limpio que lo verifique. No obstante, esto nos lleva a pensar que o pertenecía a dicha escultura o a otra similar. Sea la opción que sea, es un hallazgo que da más peso a la hipótesis de que se trata de un sector dedicado a los ritos funerarios».

Un dato que les anima a seguir con la excavación con la que comenzaron el pasado mes de abril. «Esta pieza la hemos encontrado en uno de los estratos más superficiales. Ahora mismo nos encontramos excavando a un nivel de profundidad conectado con fases ibéricas. Por lo tanto, podríamos estar cerca del momento histórico al que posiblemente pertenecería la Dama de Elche y otras esculturas funerarias parecidas», indica Ramos, a la vez que detalla que un cementerio ibérico se podría identificar, con relativa facilidad, por la singularidad de su arquitectura. «Suelen estar configurados de pilares y estructuras cuadradas donde se depositaban las urnas o las esculturas. Por lo tanto, no sería extraño que pudieran aparecer otras damas o fragmentos de las mismas», matiza.

Ramos deja claro que lo normal es que este tipo de esculturas se encuentren a pedazos, ya que, como ocurre en el caso de esta pata, «son elementos que durante otra época se reutilizaban para llevar a cabo una nueva construcción. Por ejemplo, este pie de trono se usaría en una edificación romana, teniendo en cuenta el estrato en el que ha aparecido. Pero, quién sabe, quizá tenemos suerte y damos con una cámara que guarde una dama en un estado tan perfecto como la que luce en el Museo Nacional», insiste.

Pasteles con motivos animales

El equipo «Damas y héroes» también ha desenterrado otras piezas curiosas como unos moldes de pasteleros con formas de conejo o langosta con los que, al parecer, los romanos producían alimentos para rituales que todavía no entienden con claridad. Así, también ha aparecido un pequeño proyectil de honda que, por la inscripción que lleva tallada, se podría vincular a una de las guerras civiles entre romanos que acontecieron en el territorio de Ilici por el control de la antigua Cartagonova.