Por primera vez desde el año 2009 los hogares valencianos han registrado un incremento neto en su nivel de ingresos anuales, situándose en 22.744 euros, una circunstancia que, sin embargo, no evita que sigan muy lejos de las cifras que depara el conjunto nacional. El ingreso medio en los domicilios españoles se sitúa en 26.730 euros, casi 4.000 más que en los de Elche y el resto de municipios de la Comunidad Valenciana, lo que coloca la brecha diferencial entre ambas realidades en 15 puntos. Así lo refleja la última Encuesta de Condiciones de Vida (ECV) publicada por el Instituto Nacional de Estadística, que desvela un aumento global del 2,4% en los ingresos de los hogares nacionales y de un 3% en el caso de los domicilios valencianos.

La última actualización de la ECV muestra un incremento en los ingresos de los hogares ilicitano de 612 euros respecto a su última publicación de 2016, un hecho que no se producía desde los últimos seis años y que está estrechamente relacionado con el paulatino descenso experimentado del número de parados.

Entre los principales resultados que arroja la Encuesta de Condiciones de Vida destaca que el umbral de riesgo de pobreza en los hogares unipersonales de la Comunidad se fija en 7.117 euros, lo que supone un aumento del 0,8% respecto a la última revisión realizada por el INE. Así, según la distribución de la renta en el último año, el 19% de los residentes valencianos se sitúan por debajo de este umbral. Esta tasa es ligeramente inferior en el caso de las mujeres (18,5%) que en el de los hombres (19,4%).

El límite se sitúa en 14.944 euros en el caso de los hogares compuestos por dos adultos y dos niños, mientras que la mayor tasa de riesgo de pobreza entre los hogares comunitarios se establece en los hogares de un adulto y al menos un hijo dependiente a su cargo (33,6%), seguidos por los de dos adultos con un hijo (28,2%). Respecto a los países de origen, el 13,8% de las personas que se sitúan por debajo del umbral de pobreza es de nacionalidad española, frente al 47,2% que afecta a la población inmigrante no nacida en la Unión Europea.

Gastos imprevistos

En este contexto, el 43,3% de los núcleos familiares afirma no tener capacidad para afrontar gastos imprevistos, 1,9 puntos más que el año anterior. Además, el 43%· de los hogares manifiesta llegar a fin de mes con «dificultad o mucha dificultad», y un 44,2% de no pueden permitirse una semana de vacaciones al año.