La estrategia de diversificación del sector del calzado para que el comportamiento de las exportaciones no dependa en exclusiva de las ventas que se realizan en los países de Europa ha empezado a dar resultados. Las exportaciones del pasado mes de marzo ya arrojaron un saldo positivo para el sector después de acumular numerosos meses de caída, y anotaron un importante crecimiento en el mercado de Estados Unidos, que ya se ha convertido en el quinto comprador de calzado made in Spain, adelantando a Portugal.
La Federación de Industrias del Calzado Español (FICE) destaca en el informe en el que analiza el comportamiento de los mercados internacionales que Estados Unidos escaló una posición en el ranking de compradores de zapatos durante el 2016.
Hasta Estados Unidos el sector envió 4,3 millones de pares por valor de 201,1 millones de euros, lo que supone un incremento del 6% en volumen y del 12,7% en valor, en comparación con las operaciones que se realizaron durante el 2015.
Desde la patronal zapatera, llevan mucho tiempo insistiendo a las empresas en las posibilidades que ofrece el mercado de Norteamérica, donde se produce poco calzado. En este sentido, se anima constantemente a participar en los eventos comerciales que se organizan en Las Vegas y Nueva York. No obstante, el sector es consciente de que entrar en el mercado americano no es cosa fácil, ya que cuenta con un público muy exigente.
Las exportaciones al continente americano crecieron un 9% durante el año pasado gracias, apuntaron desde la patronal, «al excelente comportamiento del calzado español en Estados Unidos, donde el valor de las exportaciones se ha incrementado un 12,76%, provocando que el peso total de los envíos en el continente americano haya aumentado un 2% en el último año».
No obstante, Europa sigue siendo, y a mucha distancia, el principal destino del calzado español, acumulando hasta el 80% de las exportaciones totales. Dentro de los diez principales clientes del sector español, todos los países son europeos salvo Estados Unidos, que ocupa el quinto lugar.
El primer destino del zapato made in Spain es Francia, pese a que las ventas a este país bajaron un 5,2% en pares y un 21,44% en valor. El segundo país que compra a España es Italia, mientras que el tercero es Alemania y el cuarto, Reino Unido. El avance de Estados Unidos, que se ha hecho con la quinta posición, ha desbancado a Portugal, que ha pasado a la sexta posición.
Desde FICE destacaron que «las exportaciones a Estados Unidos muestran una salud excelente», después de reforzar su posición como principal cliente del calzado español fuera de la Unión Europea.
