La Pasionaria ha regresado a Elche. El tripartito ha inaugurado esta mañana el nuevo jardín con el nombre de Dolores Ibárruri en el barrio de Altabix, entre las oficinas de Hacienda y el instituto Victoria Kent.

Bajo un sencillo acto y los acordes de Joan Manuel Serrat, Elche daba de nuevo la bienvenida a una de esas mujeres, que tal y como han destacado el alcalde, Carlos González, y la concejal Mireia Mollà, "fue clave en la lucha democrática y en la defensa de los derechos y libertades".

Después de que hace seis años el Ayuntamiento eliminara del mapa el monumento que anteriormente había estado en la avenida de la Libertad, el Ejecutivo local, con la única presencia de los representantes socialistas y de Compromís, ha devuelto al callejero un lugar dedicado a La Pasionaria. "Teníamos que reparar el daño que se cometía hace seis años por un gobierno municipal, un daño que nunca debió cometerse, después de que durante 20 años Elche había tenido un jardín con el nombre de Dolores Ibárruri", ha destacado la concejal Mireia Mollà durante la inauguración.

Asimismo, el alcalde ha aludido a la necesidad de hacer un acto de "justicia histórica", y calificó la decisión que en su día tomó el gobierno popular de "arbitraria e injustificada".

Más allá de los tintes ideológicos y de que Dolores Ibárruri fuera una histórica dirigente del Partido Comunista, algo a lo que el tripartito no ha querido entrar en su discurso, el alcalde también ha centrado sus argumentos para defender la medida aludiendo al papel de La Pasionaria como "una mujer luchadora por la igualdad de las mujeres y de los derechos de los obreros".

El acto ya ha levantado las primeras asperezas y desde Ciudadanos, su portavoz, David Caballero, ha afirmado que la nueva inauguración del jardín "es un gesto más de que lo único que le importa al tripartito es reabrir viejas heridas y no solucionar los problemas reales que sufren los ilicitanos a diario".