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Los miedos del Brexit al descubierto

Británicos residentes en la provincia de Alicante abordan en la UMH su futuro en España cuando el Reino Unido ejecute su salida de la UE

Seminario sobre las consecuencias del Brexit celebrado ayer en la UMH. ANTONIO AMORÓS

Los británicos residentes en la provincia de Alicante quieren seguir siendo europeos, una condición que perderán cuando el Reino Unido consume su salida de la UE a consecuencia del Brexit. Dos profesores de las dos universidades existentes en Oxford, el vicecónsul británico en Alicante y representantes de distintas asociaciones de británicos asentadas en la provincia abordaron ayer el futuro que les espera en España y las graves consecuencias que puede tener para ellos el dejar de ser ciudadanos del Viejo Continente.

Durante tres horas, y en un seminario desarrollado en la Universidad Miguel Hernández de Elche, dibujaron todas las dudas que genera el Brexit en sus vidas, idénticas a las que asaltan a los europeos que actualmente residen en el Reino Unido y que no saben cuál será su futuro una vez que el Brexit entre en vigor. Jeremy Macclancy y Fiona Ferbache, profesores llegados desde Oxford para abordar la problemática con los británicos residentes en la provincia, situaron el foco en el futuro de la Sanidad, las pensiones para los británicos que trabajan en España y el problema que puede surgir con la homologación de las titulaciones académicas.

Margaret Hales, representante en España de Ecreu (Expact Citozen Rights in UE», jubilada y residente en Benitatxell, aseguró rotundamente que «no queremos el Brexit». Junto a su marido y otro grupo de «activistas» de toda Europa, lucha por los derechos de los ingleses después del Brexit. «No sabemos que va a pasar con nosotros a partir de ahora. El Gobierno británico paga nuestras facturas sanitarias a día de hoy, pero después no será así y los seguros sanitarios para las personas mayores son carísimos y con nuestras pensiones, de las más bajas de Europa, no podremos pagárnoslos», señaló durante la conferencia.

Del mismo modo, otra gran preocupación pasa por si a los británicos que actualmente trabajan en España se les reconocerá sus años dados de alta en la Seguridad Social de nuestro país de cara a su jubilación. También, si un arquitecto o un médico podrán seguir ejerciendo en España, una vez que sus titulaciones se queden fuera de la actual normativa europea. «Hay muchos británicos que viven aquí desde hace muchos años y que ahora temen quedarse desamparados», resume Margaret Hales.

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