Varios de los clientes de un centro de Neumáticos Soledad se encontraron ayer por la mañana con un dependiente poco habitual: el presentador más longevo de la televisión pública. «Usted me suena de algo y no sé de qué», le decía un señor cuando Jordi Hurtado le comenzaba a hablar del cuadro de seguridad de su coche, durante una broma de cámara oculta . «Las mujeres suelen ser las primeras en reconocerme. Las que les pegan codazos a sus maridos por la calle y les escucho decir: "Mira Manolo, el de la tele"», se reía el presentador de un programa, que, con un contenido cultural en la era de la telebasura, mantiene unos índices de audiencia con los que sueñan muchos otros espacios.

Y con todo este nuevo modelo de consumir televisión que están imponiendo plataformas digitales como Netflix, ¿podrán mantener el éxito de «Saber y ganar»?

Absolutamente. Con motivo del 20 aniversario que cumplimos este año estamos haciendo una serie de programas especiales en los que juntamos a concursantes por edades, oficios, etcétera. En tres programas hemos unido a tres concursantes de 20 años, es decir, con la misma edad que «Saber y ganar». Durante la convivencia con ellos les pregunté cómo y cuándo veían «Saber y ganar» y sólo uno lo hacía a la hora de emisión. Los otros se lo descargaban por Internet y, en ocasiones, se veían tres de una tacada. El futuro y el presente de este espacio es que se consuma igual que «House of cards» en una de estas plataformas digitales.

Hablando de series. Ha realizado algún cameo en el «El ministerio del tiempo», en la que se interpreta a sí mismo y hace un guiño a la broma social de que usted se ha tomado el elixir de la eterna juventud. ¿Dentro de poco le veremos también en «Cuéntame cómo pasó»?

Pues creo que van por el año 1985 y en breve estaría muy bien que sacaran a la familia Alcántara viendo «Si lo sé no vengo», que es el espacio con el que empecé mi andadura en televisión. La verdad es que me encantaría aparecer en la tercera temporada de «El ministerio del tiempo» y, de hecho, ya me han dicho los guionistas que están tratando de buscarme hueco. Cuando salí en la primera fue un exitazo en Twitter.

Muchos recuerdan su etapa en «Si lo sé no vengo», pero lo que no todos saben es que fue la voz de Epi de «Barrio Sésamo».

Bueno sí, yo y otros profesionales del doblaje. Le cogí mucho cariño a ese personaje, que junto a Blas contaba unas historias extraordinarias.

La presentadora costarricense Inés Sánchez de Revuelta sigue siendo la imagen de un programa en su país, «Teleclub», desde 1963 a sus ochenta y tantos. ¿Se ve batiendo ese récord?

Pues no sé cómo tendré la voz a esa edad. Seguro que un poco más cascadilla. En el terreno de los «quiz show» (concurso televisivo) existe uno en Estados Unidosotro que se llama «Jeopardy!» y Alex Trebek lleva al frente de él más de treinta años. Nosotros solo tenemos 20 años de historia, por lo que todavía estamos hechos unos chavales.

Con todo su bagaje en «Saber y ganar», ¿sus amigos continúan queriendo jugar al Trivial con usted?

Para nada y ya hace muchos años que dejé de intentarlo. No es que tenga todas las respuestas pero muchas cosas se te van quedando. Son años y años. Además, lo abandoné porque jugar para mí es como llevarme el trabajo a casa.