Los ánimos en el colegio público El Palmeral están cada vez más tensos. El centro vuelve a estar inmerso en la campaña para que los padres escojan entre la jornada partida y la continua, escasos meses después de que se pronunciaran en las urnas a favor del modelo partido. Un hecho que ha empeorado la relación entre los profesores que se muestran a favor de la continua, y los padres que quieren continuar con el modelo partido, como se votó en septiembre, y que ha acabado, por el momento, con una denuncia de los padres a los profesores.

La tensión se ha plasmado en una denuncia que los padres han registrado en la oficia del Prop de la Generalitat Valenciana y que está dirigida al director del centro educativo. En ella muestran su más profundo malestar al entender que varios maestros están tratando de hacer campaña a favor de la jornada continua en clase y con los escolares.

Los padres que firman la denuncia aseguran que «los profesores del colegio público El Palmeral, bajo el consentimiento de la dirección del centro, han impartido en sus clases información relativa al proyecto, no sólo a los padres, sino, además, haciendo comentarios a los niños directamente sobre lo que se debe votar para no ir a clase por las tardes».

Además, denuncian que el profesorado porta «como seña de identidad de su postura un distintivo de forma visual», en referencia a chapas de diversos colores donde se lee «vota sí a la jornada continua». Es más, los padres aseguran que los maestros «incluso animan a los niños a que compren las citadas chapas».

Los progenitores que firman el escrito advierten a la dirección del colegio público que «procederemos a poner en conocimiento de las instituciones pertinentes estos hechos, a fin de que adopten las medidas necesarias para garantizar los derechos de los menores».

Y es que los padres consideran que los maestros «son la parte fuerte de la relación, teniendo una posición prevalente sobre los niños, quienes les deben obediencia y sometimiento, de tal forma que utilizan el canal de las aulas para defender una forma de trabajo».

Los denunciantes sostienen que están «ante un abuso de poder, manipulación y puede en poner en riesgo a los menores, en caso de que por parte de los padres se tenga una opinión o postura distinta».

La dirección del centro educativo manifestó ayer que no tenía conocimiento de la denuncia presentada por los padres, por lo que prefirió no valorar el conflicto.