Desde la Concejalía de Aperturas se señala que, tras la Glorieta, los técnicos municipales van a realizar un informe similar con respecto a la situación de las terrazas de la Plaça dels Algeps, donde, afirman, también se están dando numerosos incumplimientos.

En cualquier caso, esta actuación desató ayer las críticas de PP -cuya lideresa, Mercedes Alonso, comparó al tripartito con la «inquisición»- y Ciudadanos -que está convencido de que se ha vulnerado, además, la Ley de Protección de Datos-, y los dos se pusieron del lado de estos pequeños empresarios locales y arremetieron contra la forma de proceder del Ejecutivo.

«Estamos mirando con estupor que el tripartito quiere cargarse la imagen de la ciudad y, además, con imposiciones y sectarismo», declaraba Alonso, tras reflexionar que si estos locales cierran, la Glorieta volverá a estar muerta «como cuando nos la encontramos cuando llegamos al Gobierno». Desde el PP, que arropó ayer en la Glorieta a los afectados, se llegó a afirmar que recientemente se ha contratado a técnicos nuevos «que han cambiado el criterio» en cuanto a la aplicación de la normativa de Actividades Económicas.

Los populares agregaban también que no se ha dado margen para alegar, a la vez que hacían un llamamiento al tripartito para que en esta cuestión «dé marcha atrás».

«Si PSOE y Compromís actúan contra los negocios de la zona centro se encontrarán con Ciudadanos de frente», declaraba por su parte el líder de esta formación, David Caballero. Cs asegura que no se puede tolerar que se actúe de esta manera contra pequeños empresarios que dan «vida y riqueza a nuestro centro histórico, además de generar empleo». Asimismo, esta fuerza llega a asegurar que se les ha pedido que se retiren «elementos de las terrazas que hace apenas diez meses les obligaron a poner, lo que supuso una alta inversión para estos locales».