Las catas arqueológicas en el Mercado Central de Elche finalizan hoy, según ha informado la edil de Cultura y portavoz de la junta de gobierno Patricia Macià. Los trabajos, con un coste a cargo de la empresa adjudicataria del proyecto del nuevo centro de abastos, han concluido en el plazo previsto.

A partir de ahora, los arqueólogos responsables tienen tres semanas de plazo para redactar su informe definitivo y elevarlo a la Conselleria de Cultura, que también tendrá que elaborar el suyo propio. Según ha indicado Macià, posiblemente antes del verano la conselleria se pronuncie al respecto.

El informe de la Conselleria de Cultura será determinante para conocer si el actual proyecto adjudicado puede seguir o no adelante. En función de lo que indique Valencia, se derribará el actual edificio, o se procederá a la conservación de todo o parte del entorno.

«El edificio del Mercado Central de Elche forma parte del espacio ocupado por la medina islámica, protegida como área arqueológica por el Ayuntamiento de la ciudad». Así se recoge de entrada en un informe sobre unos sondeos arqueológicos realizados en el interior de este inmueble. El documento, fechado en junio de 2008 (entonces gobernaban PSOE y Compromís), está realizado precisamente por la misma empresa que ahora ha llevando a cabo las catas arqueológicas, Alebus, firma contratada por la concesionaria Aparcisa, la cual se adjudicó el contrato con el Ayuntamiento para realizar un nuevo complejo antes de que el PP perdiera la Alcaldía en 2015.

El Mercado Central está siendo desde el anterior mandato una patata caliente para el Ayuntamiento, ya que existe una gran división, con colectivos totalmente en contra de que se lleve a cabo el proyecto adjudicado, mientras que otras voces recuerdan que sin renovación ni aparcamiento subterráneo la actividad comercial está condenada.