Elche quiere atajar la carencia de viviendas sociales que tiene la ciudad con una nueva campaña para sensibilizar e involucrar a la población. Para ello, el tripartito prepara ya una iniciativa para captar casas vacías de particulares, con el objetivo de destinarlas a alquileres sociales para familias con escasos recursos económicos.

Esta medida, impulsada desde la Concejalía de Bienestar Social, pretende crear una bolsa de pisos cuyos propietarios se presten a cobrar un alquiler protegido que, en principio, tendría que determinar el dueño de la vivienda, en función de la zona y del tipo de casa de la que se trate.

Otro de los requisitos que el Ayuntamiento ya tiene claro es que ofrecerá a los propietarios un seguro de responsabilidad civil que les garantizará que van a cobrar el alquiler, pero, también, que van a encontrar sus pisos en perfectas condiciones, en caso de que se produzca un deterioro de su propiedad durante el tiempo que esté ocupada.

Asimismo, la edil de Bienestar Social, Tere Maciá, aseguró a este diario que el Consistorio está estudiando la posibilidad de ofrecer otras bonificaciones a los propietarios para animarlos a contribuir a esta causa. Mientras, a los inquilinos, la Concejalía les apoyaría económicamente en el pago de los alquileres.

La ausencia de recursos habitacionales en Elche ha llevado al tripartito a trabajar en una campaña para tratar de despertar el interés voluntario de propietarios con viviendas vacías de una forma similar a la de ayuntamientos como el de Barcelona. «Es la única solución que vemos por el momento. Ésa, y la puesta en marcha de la Ley de la Vivienda del Consell que consideramos fundamental», explicó Tere Maciá.

Paralelamente, pero por parte del Consell, la Entidad de Infraestructuras de la Generalitat Valenciana (EIGE, antigua Ivvsa) está decidida a recuperar al menos una parte de las viviendas sociales que la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio tiene en Elche,y, concretamente, en el barrio de Los Palmerales. Por el momento, ya que se ha propuesto desalojar a los ocupantes de 16 viviendas de este enclave de la ciudad.

La medida de captación municipal surge después de que el Ejecutivo local realizara anteriormente otros intentos para acceder a viviendas sociales de los bancos. Y es que las familias con escasos recursos que necesitan de forma urgente acceder a una vivienda se cuentan por centenares.

En este sentido, según el último estudio realizado por Bienestar Social para detectar las carencias existentes en la ciudad, un total de 314 familias estaban afectadas por esta situación a finales de 2015, fecha en la que se finalizó el recuento municipal. De ellas, la Oficina Municipal de la Vivienda ha podido atender ya a 280.

Por zonas, las dependencias situadas en la calle Poeta Miguel Hernández, que dan servicio a zonas como Sector V y El Pla, son las que más peticiones recibieron para solicitar algún tipo de ayudas públicas. En concreto, recibieron 131 solicitudes. Muy a la par, que la oficina de Carrús, que atiende a todo este barrio y también al de El Toscar, donde se contabilizaron 128 peticiones. En esta línea, la mayoría de dificultades en materia de viviendas que llegan hasta los servicios sociales están relacionadas con las casas en propiedad.

Ante ello, la edil de Bienestar Social incidió en la importancia de que los afectados recurran a la Oficina Municipal de Vivienda y, en este sentido, destacó que «se trata de la única posibilidad que existe para tramitar las ayudas o bien para actuar ante una posible ejecución hipotecaria».

De hecho, según Tere Maciá, el tripartito ha priorizado la paralización de desahucios con familias vulnerables y tiene en marcha un convenio con el Consejo General del Poder Judicial para tener un interlocutor en los juzgados, de manera que ayude a frenar las ejecuciones hipotecarias en Elche.