«Cada noche sacamos los coches del barrio para evitar que nos vuelvan a robar», confiesa un vecino de la calle Francisco Pérez Campillo, situada entre el barrio de Los Palmerales y San Antón. Este ilicitano, que ha preferido no revelar su nombre, ha sido víctima de uno de los robos que desde hace un mes y medio preocupa a los residentes de la zona. Y es que en apenas una semana y media, este enclave llegó a registrar hasta dos asaltos prácticamente por noche en el interior de los coches, según reconoce. Ahora, la Policía Local ha endurecido su presencia en este punto para combatir la delincuencia, relacionada también con la venta y consumo de sustancias estupefacientessustancias estupefacientes.
Precisamente, el tráfico de drogas y la sustracción de vehículos a motor son dos de las losas con las que últimamente más tienen que lidiar las autoridades policiales en Elche. Estas infracciones penales se dispararon el pasado año en la localidad, frente al resto de delitos o faltas que registraron una caída. Al menos así lo recogen las últimas estadísticas publicadas por el Ministerio del Interior actualizadas hasta septiembre de 2016.
Y así lo han detectado también desde la Policía Local de Elche, desde donde hablan de un «repunte importante» de robos en coches y garajes, principalmente, en los barrios de Los Palmerales, San Antón y alrededores del estadio. Todo ello, según las mismas fuentes, ligado al aumento de delitos por tráfico de drogas. Esa tendencia se traduce en que los casos de venta ilegal de sustancias estupefacientes se han incrementado en casi un 30%, con 83 casos en los nueve primeros meses del pasado año en comparación con el mismo periodo de 2015.
Paralelamente, tomando como referencia esa etapa, la sustracción de vehículos de motor también ha subido hasta rozar el 15% y llega a las 227 infracciones. En menor medida y casi inapreciable, también ascendieron los robos con violencia e intimidación en un 0,6%, registrándose un total de 227 casos. Por el contrario, el resto de infracciones que empañaron el municipio han descendido ligeramente, según el Ministerio del Interior. En esta línea, los delitos y las faltas, que están la cabeza en ese listado de criminalidad aportado por Guardia Civil, Policía Nacional y Policía Local, descendieron un 4,1% en 2016, al igual que los hurtos, que bajaron casi un 4%. Los daños, los robos con fuerza en domicilios y los homicidios dolosos y asesinatos consumados también bajaron en los nueve primeros meses de 2016.
Frente a estos datos, expertos en Derecho Procesal y Penal aprecian que, en general, ha habido un cierto descenso de la criminalidad en Elche, especialmente en los delitos que producen inseguridad ciudadana (robos, hurtos, daños..). «Podemos decir que estos datos de delincuencia sitúan a la ciudad de Elche dentro de unos márgenes razonables de seguridad», señala Olga Fuentes, catedrática en Derecho Procesal de la Universidad Miguel Hernández.
Eso sí, la experta matiza que un incremento de los supuestos de tráfico de drogas como el detectado puede deberse, entre otras, a dos razones: o bien a que efectivamente haya más drogas en circulación; o bien a que la policía haya extremado el celo en su persecución y que, por ese motivo, se hayan detectado más casos a lo largo de este último año.
En esa misma línea, Fernando Miró, director del Centro Crímina de la UMH y catedrático en Derecho Penal, atribuye la mayor intervención policial al incremento de casos por tráfico de drogas que expone el Ministerio del Interior, algo que calificó como «positivo». No obstante, según su apreciación, el experto ratifica que los delitos por sustracción de vehículos sí que han debido experimentar un repunte puntual.
«Si tenemos en cuenta la serie temporal, estamos ante una subida que puede tener que ver con la reducción registrada el año anterior. No creemos que este aumento sea una problemática sostenida en general», señala Miró.
Más vigilancia
La Brigada Nocturna de la Policía Local, que trabaja de forma multidisciplinar bajo la dirección del inspector Pepe Álvarez, ha intensificado su vigilancia en las zonas con más delincuencia de Elche a través de sus unidades especiales. Desde esta área señalan que los ciudadanos no solo han denunciado el tráfico de drogas, sino conducciones temerarias, agresiones y problemas de convivencia en Los Palmerales y los alrededores.
En su cometido, las patrullas de Seguridad Ciudadana atienden las llamadas ciudadanas e instruyen diligencias por ilícitos penales. La Unidad canina participa en operativos relacionados con el consumo y el tráfico de drogas a pequeña y mediana escala y la Policía Judicial persigue los delitos contra la seguridad vial, además de controlar los vehículos extranjeros o luchar contra el consumo de alcohol y droga por los conductores. Mientras, la Policía Administrativa acude a los conflictos privados, relacionados con consumo, alcohol, horarios y normas de establecimientos.
