Los Moros y Cristianos han cerrado un fin de semana lleno de fiesta con motivo de la celebración de su Mig Any. Ayer, ni el fuerte viento, ni incluso el chaparrón que cayó justo al mediodía, lograron dar al traste con el programa previsto para el cierre.

Y es que los festeros plantaron cara al mal tiempo y afrontaron el desfile como estaba previsto, recorriendo el centro de Elche en un pasacalles que volvió a llevar la marchas y el espíritu festivo por las calles de la localidad. Previamente, los bandos de la cruz y de la media luna habían celebrado un almuerzo en el barrio de El Raval, desde donde partió posteriormente el pasacalles.

Los Moros y Cristianos comenzaron el día bien temprano, con una diana libre desde distintos puntos de la ciudad hasta la plaza del Raval, donde pudieron reponer fuerzas con el almuerzo festero. En este encuentro, se aprovechó para celebrar la entrega de trofeos de los diversos campeonatos organizados por la entidad festera.

A continuación comenzó el pasacalles, que finalizó con un homenaje a los cargos festeros.