El Ayuntamiento de Elche quiere incrementar la protección del Fondet de la Senieta y también del litoral de La Marina, aunque en este último caso propone a la Generalitat Valenciana un blindaje contra el ladrillo más laxo que el que aparece en la versión inicial del denominado Plan de Acción Territorial de la Infraestructura Verde del Litoral en la Comunidad Valenciana (Pativel).

Para ello, el Consistorio ilicitano va a elevar a la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio un conjunto de observaciones, correcciones y sugerencias para mejorar la protección, en general, del suelo ilicitano.

Cabe señalar que precisamente el Fondet de la Senieta, entre El Altet y Arenales del Sol, y algunas zonas de la pedanía ilicitana de La Marina han sido y son lugares amenazados por el desarrollo urbanístico, con planteamientos para realizar numerosas construcciones muy cerca de la playa y de la mencionada zona inundable que, hasta cierto punto, se han podido frenar y donde han confluido reivindicaciones vecinales, intereses de los promotores y la larga burocracia administrativa.

Con respecto a La Marina, el principal punto de interés se centra en el sector urbanístico MR-10. El actual Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) contempla una superficie urbanizable de 460.000 metros cuadrados. Esto supondría la creación de unas 1.840 viviendas, según siempre el Ayuntamiento.

Por su parte, la propuesta del Pativel propone proteger toda superficie por debajo de 500 metros a la línea de costa, con lo cual la superficie urbanizable en el MR-10 sería solo de 76.000 metros cuadrados, por lo que se podrían construir como máximo 304 viviendas.

Frente a esto, el Ayuntamiento va a alegar en el sentido de, por un lado, reducir el ancho de la franja paralela a la costa afectada por el Pativel, tomando como referencia una línea paralela al camino que linda con la pinada a 250 metros de éste; y, por otra, incrementar la protección inicial prevista del suelo afectado, clasificando esta franja como suelo no urbanizable de protección de litoral, prolongándola en paralelo a la totalidad del LIC (Lugar de Importancia Comunitaria) de las dunas de Guardamar.

Esto, desde el punto de vista urbanístico, supone una vía intermedia al permitir la construcción en un máximo de 184.770 metros cuadrados, que se traducen en 739 viviendas (menos de la mitad de las contempladas en el PGOU, pero el doble de las que permitiría el Pativel en su redacción actual).

«Las alegaciones van en el sentido de conseguir una mayor protección de nuestro litoral, al tiempo que se pide a la Conselleria que se pronuncie sobre las zonas de aparcamiento próximas al litoral que fomenten el acceso peatonal a las playas», señalaba ayer la portavoz de la junta de gobierno, Patricia Macià.

El Ayuntamiento recordaba ayer que el edil de Urbanismo, José Manuel Sánchez, se ha venido reuniendo con representantes de La Marina en varias ocasiones para exponerles la propuesta del Pativel, recoger sugerencias y, finalmente, para informarles de las alegaciones a presentar por el Consistorio.

Desde la oposición, Ciudadanos considera que, en caso de aplicarse el Pativel, el término municipal ilicitano sufriría un impacto negativo. «Este Ayuntamiento se quiere olvidar de la inversión que puede llegar a Elche. Hay informes que cifran en 22 millones de euros la inversión prevista para los próximos tres años y en cerca de 3.000 los nuevos puestos de trabajo, algo que se perdería en caso de aplicarse el Pativel de la forma prevista hasta ahora», señala su líder, David Caballero, quien también asegura que fueron vecinos los que tuvieron que acudir al Ayuntamiento pidiendo información al respecto.

El sector MR-10 no está desarrollado y con respecto a los sectores MR-5 y MR-7 el tripartito va a alegar también para que permanezcan como suelo urbanizable (el que marca el PGOU) con el compromiso de crear un corredor verde ecológico que conecte visualmente la pinada con la sierra del Molar.

También el Ayuntamiento va a proponer al Consell que al Fondet de la Senieta se le asigne una categoría de mayor protección de la inicialmente prevista en el Pativel. Según el edil de Medio Ambiente, Antonio García, esto ya está hablado con la Conselleria y se subsanará ese «error involuntario».

El Pativel también incluye, de momento, otros errores, como denominar como AP-7 la N-332, o señalar la playa de El Altet nada menos que como Clot de Galvany, algo sobre lo que también se alegará.