El constante crecimiento del parque de motocicletas dentro del municipio ilicitano ha llevado al tripartito a proyectar seis nuevos aparcamientos específicos para vehículos de dos ruedas durante el recién estrenado 2017.

En la actualidad, la ciudad cuenta con un total de 60 zonas de estacionamiento en las que sólo pueden aparcar vehículos a dos ruedas, ocho de las cuáles se han ejecutado durante la actual legislatura; tres en 2015 y ocho más el año pasado. A pesar de ello, el área de Tráfico que comanda el edil Héctor Díez está decidida a aumentar estas áreas reservadas exclusivamente para el estacionamiento de motocicletas.

Las zonas en las que se llevarán a cabo estas actuaciones, aún por anunciar, resultarán del estudio que vienen realizando en los últimos meses desde la concejalía para detectar aquellos lugares en los que la convivencia entre coches y motos resulta más difícil.

El problema de la escasez de plazas específicas para ciclomotores surge del incremento de este tipo de vehículos en la ciudad. Mientras que en 2011 la ciudad disponía de 12.134 motos censadas, actualmente hay un total de 14.203, según los últimos datos que maneja el equipo de gobierno. Un 14,5% más, que se traduce en 2.069 nuevas motocicletas, que contrasta con la reducción sufrida entre el número de turismos durante el mismo periodo de tiempo: de 114.001 a 111.295.