El restaurante La Alacena del Flare, en pleno centro de Elche, en la Replaceta de la Fregassa, volverá a abrir sus puertas en apenas dos meses. Ahora bien, dejará de ser La Alacena del Flare para convertirse en Monumental Restaurant, después de que el Grupo Ya de Aspe haya cerrado las negociaciones para quedarse con el traspaso y el alquiler del local. Las cosas están tan avanzadas que incluso se ha fijado el 10 de marzo para la inauguración del nuevo establecimiento, en el que se ha empezado a trabajar para reformarlo totalmente. Se cierra así un capítulo del culebrón que comenzó este verano, cuando el propietario de La Alacena del Flare, el expresidente del Elche CF Ramón Sánchez, nada más acabadas las fiestas de agosto, bajó la persiana de un día para otro sin previo aviso, se dio a la fuga y dejó en la calle a doce empleados, tal y como denunciaron desde CC OO en aquel momento.

Desde entonces, el local había permanecido cerrado a cal y canto, salvo en los momentos que se aprovecharon para retirar parte de lo que había en el local. No en vano, quienes han podido acceder al inmueble en este tiempo sostienen que poco menos que se encontraba totalmente desmantelado. Y todo ello mientras que las puertas de acceso han estado cubiertas prácticamente desde que se cerró el restaurante para que, desde el exterior, se pudiera ver lo menos posible. A lo más que se llegó es a poner un cartel en el que se informaba de que el establecimiento abriría en septiembre. No se cumplió, evidentemente. En cuanto a los restos de lo que, hasta hace unos meses, era la terraza del local se retiraron recientemente.

Ahora bien, en los últimos días, la situación ha empezado a cambiar. El Grupo Monumental ha comenzado a trabajar en las instalaciones con el fin de que todo esté preparado para el día que se ha fijado para la apertura.

La compañía aspense lleva más de cuatro décadas dedicada a la organización de eventos y a la gastronomía, y, junto al Catering Ya, gestiona una quincena de restaurantes a lo largo de la provincia y de Murcia. En Elche, sin ir más lejos, están al frente del Lizarrán situado en el centro comercial l´Aljub. Ahora, lo que buscan es acercar a Elche el modelo del Monumental Restaurant, implantado en el centro de Murcia, y todo con la vista puesta en seguir exportando este modelo a otras localidades del entorno.

En este sentido, el diseño del local de la Replaceta de la Fregassa va a dar un giro copernicano, con el objetivo de conseguir, tal y como está planteado en Murcia, el ambiente parisino propio de los años veinte del siglo pasado, y todo lo que ello supone. En cuanto a la cocina, se basará fundamentalmente en la dieta mediterránea con toques contemporáneos, y con un horno de brasas como uno de los pilares de esta nueva propuesta gastronómica que aterrizará en Elche en marzo.

Así las cosas, y, al menos por el momento, se resuelve una de las grandes incógnitas con la que tanto se había especulado en los últimos meses: la de qué iba a ocurrir con este local tan céntrico en Elche.

El administrador cifra la deuda en 238.000 euros

El Juzgado de lo Mercantil número 3 de Alicante, con sede en Elche, mediante un auto de septiembre del año pasado, declaró el concurso voluntario de acreedores de la sociedad de Ramón Sánchez, Exclusivas Escandell. En este sentido, el administrador concursal sitúa en 238.318 euros los créditos concursales incluidos. Del total, unos 44.000 euros se corresponden al impago de impuestos a la Agencia Tributaria, con los intereses y recargos incluidos; otros 28.000 euros se adeudan por este mismo concepto a SUMA; casi 35.000 euros se deben a la Tesorería General de la Seguridad Social; y unos 900 euros, a la Generalitat, por una sanción. A partir de ahí, el grueso de la deuda se centra en proveedores varios y en los salarios de los trabajadores, nueve en total, según la lista de acreedores. En este sentido, las cantidades pendientes de pago a los empleados llegan en algún que otro caso a superar los 6.000 euros, con nóminas arrastrando desde el mes de junio. Finalmente, y por lo que respecta al inventario de bienes y derechos, el administrador eleva el valor neto contable de los activos a cerca de 120.000 euros, aunque rebaja el valor de mercado a casi 66.000 euros. Sólo un dato: el valor neto contable de la pintura del establecimiento se cifra en 450 euros, aunque, como obviamente se especifica en el documento, el valor de mercado es cero.