El Sindicato de Empleados Públicos (SEP) de la Comunidad Valenciana sigue en pie de guerra contra el Ayuntamiento de Elche. Si hace unos días, se abría un frente por una mesa general de negociación que consideraban que no se había convocado en plazo, ahora vuelven a la batalla, aunque en esta ocasión por los sistemas utilizados para cubrir las vacantes de los empleados municipales por parte de Recursos Humanos, sistemas que, además, tildan de «dedocracia». Al respecto, señalan que «los trabajadores vemos cómo para algunos las puertas de los traslados y de los ascensos están abiertas, mientras que para otros no, y esa decisión sólo depende de Recursos Humanos. No se sigue casi nunca ningún proceso de provisión de puestos establecidos».

Desde la organización, entienden que, con la legislación en la mano, la provisión de puestos se debe hacer por concurso, libre designación, comisión de servicios y mejora de empleo, pero nunca por la atribución temporal de funciones, que, según el SEP, es lo que se está aplicando desde el Ayuntamiento de Elche. «Ahora la moda es hacer estas formas de ascenso que no recoge la legislación y que no es ni más ni menos que nombrar a una persona elegida por Recursos Humanos, y llevarla al departamento que quieren, y subirle el sueldo, y todo eso sin respetar los principios de mérito, capacidad e igualdad que indica la ley». Eso, a su juicio, impide que los trabajadores puedan presentarse a los puestos que quedan vacantes en la plantilla municipal, y lo que provoca, según su opinión, es que haya personas que ocupen jefaturas de negociado, dejando fuera a las que estaban en la bolsa. Por ello, desde el SEP anuncian que estudiarán las medidas legales que pueden adoptar la respecto.