Ángela y María se preparan, junto al resto de compañeras, para el gran día. El 3 de diciembre, Día Internacional de las Personas con Discapacidad, el Gran Teatro de Elche acoge a la compañía Rokuro Kubi, perteneciente a la Asociación Artes, Cultura y Ocio de Elche, con la representación de su proyecto más ambiocioso. Déjate llevar, espectáculo de danza contemporánea, fusiona ritmos flamencos con baile español con los que el público vivirá, al tiempo que las artistas que lo representan, un dejarse llevar por los sentimientos y pasiones y no sucumbir a las presiones de la socidad.

Rokuro Kubi, formado por doce chicas con discapacidad intelectual junto a sus monitoras, lleva actuando desde 2005. Sin duda, su pasión por el teatro es el objetivo común que une a todas ellas y que las ha llevado a día de hoy a representar un espectáculo tan logrado y exquisito como es Déjate llevar. Fines de semana, tardes y mañanas abarrotadas de ensayos desde hace un año y que ya va llegando a su fin. Todo esfuerzo y trabajo invertido se verá recompensado cuando estas doce jóvenes, con edades comprendidas entre los 20 y 40 años, suban al escenario del Gran Teatro de Elche y saquen a relucir todo el potencial que corre por sus venas.

Pero las integrantes de Rokuro Kubi no sólo son compañeras de baile. Muchas de ellas pertenecen a la asociación desde que eran pequeñas, por lo que se ha generado en vínculo de verdadera estima entre todos los integrantes de Artes, conviertiéndose en una gran familia. Juana Mª Sánchez y Mª Ángeles Jaen, presidenta de la Asociación Artes, Cultura y Ocio de Elche y directora de la Escuela Artes respectivamente, han visto crecer a estas chicas y son testigos de la evolución y el progreso que cada una de ellas ha ido experimentando con el paso de los años. Es el caso de María.

El Gran Teatro de Elche acoge un espectáculo protagonizado por doce chicas con discapacidad

El Gran Teatro de Elche acoge un espectáculo protagonizado por doce chicas con discapacidad

Auténtico amor por el baile

«El baile es mi pasión». Así es como María, que comenzó hace 10 años en Artes, pone nombre a lo que siente por este tipo de arte. «Estoy feliz, me he emociona la gente cuando nos aplauden». Esfuerzo y trabajo es lo que María, de 25 años, invierte en cada sesión de ensayos. Para ella es su vida y sin esta actividad tiene claro que «lucharía para que Artes estuviera y conseguir que se quede, no solo por mí, sino también por las compañeras y los profesores». Para ella, la amistad es un valor fundamental y sin titubear confiesa que todos ellos son parte de su vida.

Pero cuando María entró en Artes «era incapaz de presentarse, decir su nombre y lo que le gustaba porque sentía vergüenza, no sabía expresarlo y ahora...es todo desparpajo», cuentan sus monitoras Juana Mª y Mª Ángeles, quienes describen que trabajar con personas con discapacidad supone «un reto cada día». Para ellas, principales referentes para las chicas de Artes, es «gratificante, emocionante e ilusionante. Es un desafio, porque te llega una persona con una dificultad que ves que quiere pero que no puede y reacae en ti conseguir que saque lo mejor de sí misma y se supere». Un reto que siempre ven como «una posibilidad, una capacidad en la que trabajar y que sin un trabajo de equipo y continuo no sería posible».

Un desarrollo integral

La Asociación Artes, Cultura y Ocio de Elche, fundada en 2003, pretende acercar el arte a las personas con discapacidad y desarrollar multitud de proyectos artísticos, donde puedan expresarse e integrarse en una sociedad como la nuestra. Para ello realizan actividades artísticas como artes plásticas, música y danza-teatro, lo que supone para las personas con discapacidad un recurso para expresarse, compartir experiencias, tomar decisiones y desarrollarse de forma integral, que es en definitiva el principal objetivo de la asociación.

Tanto Juana Mª como Mª Ángeles asumen una actitud reivindicadora allá donde van: «demostramos en todos los sitios a los que vamos que es posible una integración en las artes escénicas, ya que para nosotros el arte es un derecho fundamental».

Reconocen que, muchas veces, para las personas con discapacidad «es más complicado desarrollar una actividad artística porque suelen tener dificultades en algo tan básico como puede ser el lenguaje». Por este motivo llevan a cabo talleres de danza-teatro, con el fin de buscar la expresión a través del movimiento y de la música, y en Artes les facilitan las herramientas necesarias para que consigan y experimenten lo mismo que el resto de personas. Y será con Déjate llevar cuando pongan la guinda al pastel que llevan creando durante tanto tiempo con tanta ilusión.