El Servicio de Neurocirugía del Hospital General de Elche es actualmente el más pequeño de la Comunidad Valenciana en número de especialistas (con cinco) pero está en vísperas de crecer, dado que, en cuanto se ponga en marcha la distribución de áreas de referencia que ha anunciado la Conselleria de Sanidad, duplicará el número de pacientes. Así lo manifestó ayer el doctor José Miguel Segura, quien asegura que desconoce en qué momento se pondrán en marcha los cambios que ya se han hecho públicos por la Generalitat Valenciana y que implican que pasarán a depender del Hospital General de Elche prácticamente la mitad de los habitantes de la provincia, en concreto todos los del «cono sur», desde Vega Baja a Aspe y Elda, incluyendo Crevillent y Santa Pola. Lo que esperan desde la sección del General de Elche es que con esta reorganización aumenten también los medios tanto humanos como técnicos.

De hecho, el especialista expone que se están diseñando sobre el papel lo que tendrán que ser los quirófanos del futuro a medio plazo en el Hospital General, y que en ellos ya se ha demandado que se incorpore un equipo de resonancia magnética que permita evaluar el éxito de la operación en el mismo momento en que se produzca. De esta forma, los especialistas podrán valorar si se han conseguido los resultados previstos de la cirugía, sin necesidad de esperar unos días, reduciendo de esta forma imperfecciones que pudieran ser subsanables o evitando en algunos casos que los pacientes tengan que volver a pasar por el quirófano para resolver algo que no se detectó a tiempo. Dos hospitales de Cataluña cuentan ya con este sistema, según el especialista, que da «una imagen mucho más fiel» que el TAC. «Se incorporó ya un microscopio» con el que se puede ver con contraste la trama vascular cerebral para confirmar que se ha cerrado correctamente una operación y que no se ha «clipado» una arteria, por ejemplo, en caso de aneurisma cerebral; sin embargo, ese recurso no se tiene para los tumores cerebrales. Esa resonancia magnética «nos daría fidelidad, serviría para todas las patologías».

No es la única mejora que demanda el Hospital General de Elche, que opera todo tipo de tumores cerebrales, cada vez más metástasis cerebrales (lo que resulta lógico, explica el especialista, porque la población tiene mayor esperanza de vida y hay cada vez más medios para diagnosticar), todo tipo de intervenciones de columna desde un punto de vista mínimamente invasivo y patologías vasculares. En este último campo, el «handicap» es que «no hay una unidad de neurorradiología intervencionista y estamos luchando por conseguirla», entre otras cuestiones para llevar adelante el marco del «código ICTUS», un protocolo de actuación y rápida coordinación ante casos de infarto cerebral.

Seis áreas

La Conselleria de Sanidad ha rediseñado el mapa sanitario de la Comunidad en seis áreas asistenciales, cada una con un centro hospitalario de referencia para la atención terciaria (lo que se han llamado «superespecialidades»), y el General de Elche lo será para el Hospital General de Elda, el del Vinalopó, el Hospital Vega Baja - Orihuela y el Hospital de Torrevieja.