El Festival Medieval cerró ayer sus actividades de ambientación en las calles con el espectáculo del grupo Lobos Negros, especializado en espectáculos de lucha y combate medieval.

Así, numerosos ilicitanos quisiseron sentirse como Robin Hood por un día y se acercaron, ya no solo para ver la exhibición, sino también para convertirse en arqueros por unos momentos y conocer un poco más cómo eran las armas de la época medieval.

Así el ambiente del medievo invadió la zona de la plaza del Congreso Eucarístico, donde se desarrolló la actividad que atrajo la atención de pequeños y mayores.

Los especialistas comenzaron dando a conocer el tipo de armas que se utilizaban en la época, como los característicos arcos y ballestas que el público identificaba con la armas de conocidas películas de época.

Del mismo modo, también introdujeron a los asistentes en cómo eran las armaduras del momento, entre otras cuestiones. Además, realizaron una demostración de tiro y combate medieval e incluso ofrecieron al público la posibilidad de practicar su puntería con uno de estos artilugios adaptados.

Por otro lado, los más pequeños también pudieron disfrutar ayer con el espectáculo de teatro infantil las «Faules de Ramón Llull», que se desarrolló en la sala La Tramoia.

Por la tarde, las actividades continuaron en el Palacio de Altamira con la representación de «Mendrugo. Concierto teatral sobre un bobo del siglo XVI», de Lope de Rueda a cargo de Teatro Strappaton & La Danserye.

La programación del Festival Medieval continúa hoy con el montaje teatral «Joanot», a cargo de Esclafit Teatre, a las 20.30 horas, en el Gran Teatro.

Por otro lado, a las 23 horas, en la plaza del Congreso Eucarístico tendrá lugar un espectáculo piromusical a cargo de la pirotecnia Peñarroja en el que está previsto que se escuchen diferentes piezas musicales medievales junto al disparo de fuegos artificiales.