El III Congreso de Patrimonio Inmaterial de la Humanidad, organizado por la Cátedra Misteri d'Elx de la Universidad Miguel Hernández, arrancó ayer en el Centro de Congresos Ciutat d'Elx con las ponencias de tres expertos que debatieron sobre las ventajas y desventajas de la patrimonialización de las fiestas, y en concreto, del Misteri d'Elx.

Así, el primero en intervenir fue el vicerrector de Cultura de la Universidad de Valencia, Antonio Ariño, quien habló sobre el «Patrimoni cultural i festa» en un sentido amplio y también, más concretamente, aplicado al caso Elche.

El experto destacó que el reconocimiento del Misteri d'Elx es anterior a la catalogación de patrimonio cultural, de hecho, «ya en 1931, la República lo reconoció como Monumento Nacional, por su singularidad y exquisitez». No obstante, Ariño también llamó la atención sobre que «no todo se puede considerar patrimonio. El criterio fundamental es en qué medida respeta valores como los derechos humanos, la interculturalidad y sostenibilidad». Y, en este sentido, puso sobre la mesa aspectos de La Festa que pueden generar conflictos de cara a un futuro, como la Judiada o la ausencia de mujeres.

En el primero de los casos, «se puede llegar a ofender a la comunidad judía. Por otro lado, cuando se crea el Misteri las figuras femeninas son representadas por hombres, pero hoy las mujeres participan por igual en la sociedad, por lo que hay elementos que pueden ser motivos de conflictos o de transformación. Y eso no va en contra de La Festa. El tiempo seguro que impondrá hacer cambios porque puede haber personas que se sientan ofendidas», expresó el experto.

Por otro lado, el inspector de Patrimonio de la Conselleria de Cultura Luis Pablo Martínez disertó sobre «El patrimoni cultural inmaterial i la singularitat patrimonial d'Elx».

En su intervención el experto destacó que «el patrimonio inmaterial del Misteri, en toda su riqueza, es un recurso estratégico a todos los efectos: cultural, educativo, ambiental, y también turístico». En este sentido habló sobre la interacción de La Festa con los elementos como monumentos, el patrimonio arqueológico o el arte público, para configurar una gran riqueza para atraer a visitantes.

Por su parte, el catedrático de Historia del Teatro Catalán de la Universitat Rovira i Virgili Francesc Massip presentó su ponencia sobre «Patrimonis reversibles: el cas de la Festa», en la que cuestionó algunos cambios que puede conllevar el concepto de patrimonio inmaterial y se refirió, por ejemplo, al cambio de vestuario que se produjo, que «es contrario al espíritu de lo que es un monumento histórico artístico como es la Festa». Para el experto, «resulta anacrónico y completamente contrario a la tradición, que es lo que se dice que se debe mantener».

El director de la Cátedra del Misteri d'Elx, Pablo Mas, destacó el interés que han suscitado las jornadas, que permiten «adelantarnos» y hablar de «lo que pueda resultar peligroso para la salvaguarda de lo que se quiere mantener», que es el Misteri d'Elx.