Las iniciativas que ha impulsado la nueva asociación de comerciantes de la zona centro en su primer año han tenido resultados dispares y valoraciones diferentes entre los empresarios del casco antiguo de la ciudad. Una de las más polémicas fue la decisión de abrir las tiendas los domingos, aprovechando el cierre de los comercios en Alicante. Sin embargo, la división de los asociados frustró que saliera adelante esta propuesta, que tenía como objetivo atraer a nuevos compradores y diferenciarse de otros municipios de la provincia.
Otra de las ideas que todavía se mantienen, pero que parece que no ha tenido demasiadas ventajas para la caja de los comercios ha sido la de hacer descuentos u ofrecer aparcamiento gratuito en los parkings de pago de la ciudad.
Frente a ello, hay otras medidas que durante este ejercicio sí que han tenido su repercusión positiva para los establecimientos que las impulsaron. Una de ellas fue los «Pop Up Store», que animó las ventas en la calle. Además, destacan otras campañas de dinamización con mercadillos vintage, los bailes de salsa en la plaza de las Flores, los viernes sin cerrar al mediodía en el Carrer Ample y otras iniciativas de animación en verano y Navidad. a. f.
