Marcha atrás. El Consell ha retrocedido y ha incluido ahora a las zonas rurales de Elche y del sur de la provincia en la lucha por conseguir subvenciones europeas para el desarrollo de territorios Leader. Tras haber echado para atrás la propuesta presentada por la Agrupación Rural Sur de Alicante (GAL), compuesta por 13 municipios y más de 60 entidades, la Generalitat ha rectificado. Este colectivo está integrado por los municipios de Agost, Aigües, Busot, Torremanzanas, La Algueña, La Romana, Hondón de las Nieves, Hondón de los Frailes, Salinas, Daya Vieja y algunas pedanías de Orihuela, Almoradí, además de Elche.
El alcalde del municipio ilicitano, Carlos González, confirmó a este diario que el Ejecutivo autonómico ha estimado las alegaciones presentadas por el grupo en el que se encuentran representados diferentes colectivos del Camp d'Elx. Y es que, esta asociación rural había estallado al conocer que se quedaba fuera de la gestión de las ayudas y que el Consell tan solo había aceptado solo una agrupación de la provincia, la que se encuentra en la zona norte.
Asimismo, según el primer edil, la presión política también ha tenido sus frutos en el cambio de postura del Consell.
«Presentamos nuestra preocupación, nuestro malestar e interés porque la provincia y, en concreto, Elche, tuviera el segundo grupo de acción local que les permitirá optar a las ayudas», apuntó Carlos González.
Después de este proceso, la conselleria ha notificado al Ayuntamiento de Elche su cambio de rumbo, aunque todavía no está notificado a los destinatarios. Ahora, tras la cesión del Consell, la provincia de Alicante podrá tener un segundo grupo de acción local para entrar a concurso y conseguir fondos europeos.
«Es una nueva noticia porque permite a Elche optar a ayudas que serán muy importantes para el Camp d'Elx, que se encuentra en un momento de resurgimiento y en el que se recupera el interés por el campo», manifestó el alcalde ilicitano. De hecho, una decena de asociaciones rurales, así como otros agentes implicados, han sido incluidos por parte del Consistorio ilicitano para elaborar la primera ordenanza que tendrá la ciudad para regular el comportamiento en el campo.
Y es que, según Gonzalez dejar fuera a las zonas rurales de Elche suponía «romper con la dinámica positiva el hecho de no optar a estas ayudas», apuntó el máximo responsable del Ayuntamiento.
Las 23 pedanías ilicitanas lideran esta iniciativa, junto a las asociaciones agrarias de ADR (Asociación para el Desarrollo Rural del Camp d'Elx). El proyecto con el que lucharán por atraer subvenciones tiene como filosofía incentivar y mantener el paisaje rural con políticas concretas, a través del agroturismo, el turismo rural y la artesanía. De hecho, tal y como explicaron sus impulsores, este grupo de trabajo, constituido en una asociación, persigue activar el emprendedurismo rural para crear empleo, asentar el territorio, salvaguardar el paisaje y el cultivo agrícola.
Malestar inicial
El colectivo, que optaba a la gestión de ayudas para el desarrollo de los territorios rurales por primera vez, aseguró sentirse discriminado tras conocer la baremación que ha realizó la Conselleria de Agricultura, a partir de la Orden 5/2016 de 20 de abril, con la que se quedaba fuera, al tener en cuenta los núcleos urbanos de Elche y Orihuela.
La agrupación defendió que las ayudas son para las pedanías, y no para los núcleos urbanos, por lo que decició presentar alegaciones con el fin de que la Conselleria atendiera las necesidades de las zonas rurales del sur de la provincia. Por el momento, han pasado el primer corte cinco agrupaciones de Castellón, cuatro de Valencia, y sólo una de Alicante, la de la zona norte. Ahora, el colectivo de Elche y de otros trece municipios del territorio alicantino tendrán vía libre para luchar por esas ayudas con la presentación de proyectos que puedan mejorar el futuro del mundo agrario.
En concreto, los fondos Leader se centran en tres ejes. Por un lado, en formar a la población en labores específicas que ofrezcan una verdadera y sostenible alternativa laboral. La segunda se dirige a ayudar a las pequeñas empresas en la mejora de su productividad y comercialización. Y la tercera, tiene que ver con financiación de nuevas iniciativas económicas.
