No todo el tripartito acabó firmando el martes el Código de Buen Gobierno de la Generalitat. Cierto es que no se ha hecho excesiva sangre, en parte porque muchos ni repararon en que no estaba, en parte porque otros justificaron su ausencia alegando que estaba en la Diputación y eso se dio por bueno. Sin embargo, no sólo PP e Ilicitanos por Elche se abstuvieron de estampar sus rúbricas. Hubo una excepción en las filas socialistas, la del edil de Fiestas, José Pérez, a la sazón, expresidente de la Junta Mayor de Cofradías y Hermandades de Semana Santa de Elche, y hermano mayor de la Fervorosa Hermandad de la Flagelación y Gloria. Su abstención, de hecho, se sustentó en ese mismo artículo del código ético en el que se han amparado los populares a la hora de rechazar su adhesión a esa especie de manual del buen político. El artículo de la discordia no es otro que ese dedicado a la aconfesionalidad, que determina que la asistencia a procesiones y otros actos religiosos no es de obligado cumplimiento, y que será a título individual. Es más, como representante político, se establece que no se podrá participar en la presidencia de esos actos religiosos, salvo en aquellos casos en los que, por «razones históricamente consolidadas», dice literalmente el texto, haya un valor cultural que trascienda su origen religioso. Entienden en la casa grande que entrarían ahí Misteri, Domingo de Ramos, Procesión de las Aleluyas, Venida de la Virgen y poco más, aunque, para otros, eso puede acabar siendo un coladero y, por entrar, que acabe entrando todo.

Sea como sea, y de momento, polémica de puertas hacia afuera ha habido poca -por no decir ninguna-, pero ayer ya empezaba a circular en determinados círculos políticos la ausencia del edil de Fiestas. Eso sí, todavía «sottovoce». En cualquier caso, José Pérez se mostraba ayer por la tarde conciso, pero contundente: «Simplemente lo he hecho por coherencia. No tengo ningún problema con el resto de artículos, y, como es lógico, aunque no los haya firmado, voy a cumplirlos, pero el de la aconfesionalidad me genera un conflicto, porque creo que es respetable no salir en una procesión, pero también es respetable decidir hacerlo», sentenció tratando de anticiparse así a cualquier crítica, y dejando entrever que, al menos en estos momentos, su decisión está tomada.

En términos muy similares se pronunciaba el alcalde de Elche, Carlos González. «La adhesión al Código de Buen Gobierno es algo voluntario y, por eso, se firma de forma individual. Además, en el caso de José Pérez, se dan unas circunstancias especiales por su especial vinculación con la Semana Santa, que le aconsejan no firmar el documento», terció el jefe de filas de los socialistas en Elche. Para ellos, la cuestión ya está totalmente cerrada.