El Hospital General de Elche ha acelerado el ritmo de las obras de reforma de la segunda planta del edificio sanitario para tratar de contrarrestar el retraso en su inicio. De esta forma, la intención de la dirección del centro sanitario ilicitano es empezar a abrir los servicios cerrados de forma progresiva durante la segunda quincena de este mes de octubre.

Las obras tenían que haber empezado en julio para acabar en septiembre, pero un retraso en el proceso administrativo llevó a que los operarios no pudiesen empezar a trabajar hasta el mes de agosto. Aún así, la empresa ha acelerado el ritmo de trabajo por lo que se espera que el grueso de la obra pueda quedar acabado entre esta semana y la próxima, con el objetivo de empezar a amueblar las instalaciones de cara a su reapertura. Estas obras han afectado a las especialidades de Oncología, Hematología y Neurología, lo que significa un cierre de medio centenar de camas desde el mes de julio.

Una de las consecuencias del retraso en las obras es la necesidad de reubicar a todo el personal de las zonas cerradas, una vez que ha finalizado el periodo vacacional estival. De esta forma, este mes de octubre se ha creado una gran bolsa de volantes, con enfermeros y auxiliares que no tienen estos días un puesto fijo, ya que su planta está cerrada por obras, por lo que cada día son destinados a reforzar otros servicios en función de las necesidades del hospital.

Esta circunstancia ha generado mucho malestar entre el personal afectado, llegándose a registrar bajas de sanitarios que no están dispuestos a cambiar de servicio, según indicaron fuentes sanitarias a este diario.

No obstante, el compromiso de la dirección del Hospital General es que la segunda planta del centro sanitario, y todo el personal afectado, empiece a recuperar la normalidad durante la segunda quincena de octubre.

Mientras tanto, el servicio de Oncología sigue reubicado en la octava planta del hospital con todo su personal específico, y los pacientes y el personal de las especialidades de Hematología y Neurología siguen repartidos por otros servicios.

Pese a todo, la obra que se está llevando a cabo en el Hospital General de Elche se considera necesaria para mejorar la calidad asistencial. La actuación que se está desarrollando abarca un total de 1.480 metros cuadrados. Con ella se han redistribuido y acondicionado los espacios, de modo que resulten más óptimos para pacientes y personal.

El proyecto de obra incluye dotar de ducha a todos los baños de las habitaciones de hospitalización que todavía no disponían de ella. Dos de estos baños estarán adaptados a discapacitados. En todos los aseos de hospitalización donde se coloquen duchas, un total de 23, se han suministrado e instalado nuevos inodoros, lavabos, así como toda la grifería y accesorios: asideros, mamparas, espejos y repisas. También se han cambiado los falsos techos, azulejos y suelos existentes. Además, se está colocando iluminación led, y se ha modificado la instalación eléctrica donde ha sido necesario.

Finalmente, se han renovado las puertas, las zonas alicatadas y las puertas de los ascensores se están tratando con imprimación y dos capas de esmalte acrílico, mientras que los controles de Enfermería, despacho y almacenes se han mejorado igual que el resto de la planta. En este proyecto la Conselleria de Sanidad ha invertido 330.000 euros.

A diferencia de otros años, desde los sindicatos y la junta de personal se considera que la obra que se está llevando a cabo resulta necesaria para mejorar las instalaciones sanitarias, por lo que no se ha criticado que la actuación se haya utilizado para enmascarar el cierre de camas en verano, como aseguraron que ha sucedido en años anteriores, cuando se cerraban plantas varios meses con el único de objetivo de dar una capa de pintura y poco más.