La Conselleria de Educación ha ordenado el primer movimiento para preservar la seguridad de los estudiantes del IES de Torrellano. Pero ojo, para esta acción, no se ha tenido que rascar el bolsillo. El director del centro, José Vicente Orts, ha confirmado a este diario que, hasta nueva orden, será el centro el que se tenga que encargar, con sus propios fondos, de pagar el alquiler de esta valla metálica de protección, con la que se ha perimetrado toda la fachada del centro que, desde el curso pasado, presenta importantes grietas en su ladrillo caravista, lo que podría generar algún tipo de desprendimiento. Orts asegura que el Consell se ha comprometido a reintegrarles esos abonos cuando quede solucionada la obra.
La pregunta es cuándo sucederá eso. De momento, la Generalitat tiene que acordar con la empresa constructora quién se hace cargo de la reparación de la obra, que por ahora se ha valorado en 250.000 euros. Una cuestión que se dirimirá en el momento en el que se compruebe si estos problemas tienen que ver con un vicio oculto de la propia obra o del propio paso del tiempo, según han reseñado a este diario fuentes del Gobierno valenciano. En el primer caso, la responsabilidad sería de la empresa de construcción, que en este caso es FCC -que hace 13 años fuen subcontratada por Ciegsa para levantar el edificio- y, en el segundo, d ela Generalitat. Un técnico de FCC, experto en caravista, está previsto que acuda esta semana a dichas instalaciones para valorar si existió vicio de obra.
Si la reparación se demora tres o cuatro meses, el director del IES Torrellano asegura que el pago del alquiler de la valla es un gasto asumible pero si se extiende más meses o incluso un año ya podría ser un problema, puesto que el presupuesto anual del instituto tampoco es muy elevado. A Orts "no le parece lo más correcto" esta postura de la Conselleria sobre el pago de este alquiler, pero le reconforta que, al menos, "esté actuando".
A los que les parece indignante la situación es a un sector del Ampa que esta mañana se ha manifestado, por tecera vez consecutiva -quedan todos los martes- en la puerta del instituto. Uno de los padres, Pablo Beneito, duda mucho de la falta de liquidez del Consell para solucionar este asunto: "Si no han sido capaces de crear una partida presupuestaria ante una situación de inseguridad, evidentemente si más adelante falta dinero, nos tememos que van a hacer oídos sordos". También reclama que les entreguen un informe que cerciore la seguridad de los alumnos con estas medidas.
Técnicos ayer poniendo las vallas. Foto: Antonio Amorós
