La necesidad de un servicio de calidad es una de las peticiones que ha lanzado el Ayuntamiento de Elche a Urbaser, tras la venta de la empresa de servicios de limpieza viaria y recogida y tratamiento de residuos a un grupo chino por un importe de entre 1.164 y 1.399 millones de euros.
El alcalde, Carlos González, destacó esta condición y la importancia de que los gestores territoriales conozcan las necesidades de la ciudad al conocer el traspaso realizado ayer por la constructora ACS, presidida por Florentino Pérez.
De esta forma, el Ayuntamiento se mostró respetuoso hacia las operaciones de capital que se realizan en las empresas cotizadas, pero no dejó de lado las alusiones a la calidad. Una cuestión esta que se ha puesto en entredicho en el último año por el Ejecutivo local, la oposición y los vecinos de Elche.
De hecho, ayer mismo, la Corporación municipal aprobó en el pleno una moción, presentada por Ciudadanos, para ejercer un mayor control sobre la recogida de los residuos sólidos municipales y la limpieza viaria de la ciudad, ante las quejas vecinales sobre la suciedad en los diferentes barrios. En esta línea, el Ayuntamiento se ha comprometido a verificar de forma periódica el trabajo de la concesionaria, además de publicar de forma mensual en la web municipal el itinerario de los operarios y el calendario de actuaciones en cada punto del término municipal.
Esta medida llega justo después de que el equipo de gobierno desestimara las alegaciones de Urbaser contra la sanción superior a 10.000 euros impuesta por la falta de recogida de basuras en Navidad. Un nuevo paso adelante con el que el tripartito se ha mostrado firme en su intención de poner punto y final a los problemas por la suciedad que últimamente afloran.
ACS ha enmarcado la venta de Urbaser en su estrategia de rotar activos que considera maduros y no estratégicos con el fin de lograr recursos para seguir reduciendo su deuda e invertir en nuevos proyectos. La empresa de recogida de basuras, sobre la que el grupo tenía colgado el cartel de «se vende» desde hace casi un año, es una de las compañías que este pasado verano logró parte del contrato del servicio de recogida de basuras de Madrid. La compañía tiene actividad en Francia, Reino Unido, el Norte de África y Sudamérica.
