El colegio El Toscar de Elche sigue con su empeño de pasar en octubre al modelo de jornada continua pese a que el pasado jueves ganó el no, y todo ello en un ambiente de excesiva tensión entre la comunidad educativa, hasta el punto de que ayer fue necesaria la presencia de la Policía Nacional en el centro.

Padres a favor de la jornada partida pidieron apoyo ayer por la mañana a la Policía Nacional para entregar en el colegio alegaciones en las que piden a la Conselleria de Educación que se respete el resultado que salió de la urnas el pasado jueves. Al parecer, según indicó una madre, «no nos querían coger las alegaciones, por lo que hemos llamado a la Policía Nacional». Una pareja de agentes se trasladó hasta el colegio donde, tras conocer el problema, informó a los padres de que también podían presentar la documentación en la Dirección Territorial de Educación o en la oficina del Prop de la Generalitat Valenciana. «No vamos a presentar las quejas en el colegio. Ya no nos fiamos», decía la madre que llamó a la Policía.

Desde el centro educativo aseguraron a este diario que el conflicto fue fruto de una confusión. Concretamente, afirmaron que los padres querían poner el sello del colegio en sus alegaciones, y que ello no es posible, pero para ninguna alegación, con independencia de cuáles sean sus pretensiones. Por lo demás, insistieron en que estaban dispuestos a tramitar todas las alegaciones.

Finalmente, el centro educativo sí que envió ayer a la Dirección Territorial de Educación un paquete de alegaciones favorables al sí con una nueva acta del escrutinio en la que gana el horario intensivo. El motivo de esta modificación se debe a la depuración que se ha llevado a cabo del censo del colegio después de las votaciones. Tras ello, se han eliminado varios nombres que, según indicaron desde la dirección del colegio, figuraban en el listado erróneamente.

El pasado jueves 288 padres de El Toscar votaron que sí y 96 que no a la jornada continua, sobre un censo de 530 personas. Esto significó que el 54,3% del censo de la comunidad educativa había apoyado el sí, pero que el colegio iba a seguir con la jornada partida al no haber obtenido el voto afirmativo el respaldo del 55% del censo, como estable la normativa de la Conselleria

Ya al día siguiente, el pasado viernes, desde la dirección del colegio advirtieron que el censo contenía errores que no habían sido detectados con anterioridad. «Nadie comprueba si sobra gente antes de unas votaciones, sólo se mira que esté la persona interesada», apuntaron unos padres favorables al sí ayer a las puertas del centro educativo.

Por este motivo, la comisión escolar que ha abordado las votaciones a la jornada continua mantuvo ayer una reunión durante varias horas para analizar lo sucedido y decidir qué hacer. La decisión fue depurar el censo y elaborar una nueva acta con los resultados del jueves, dando todos los votos por buenos, para enviarla a la Conselleria.

El resultado fue un censo formado por 511 personas, 19 menos que en el anterior. Un nuevo listado con el que los votos favorables a la jornada continua, 288, suponen el 55,59% del censo, imponiéndose a los 96 del no.

Estos datos se reflejaron en una nueva acta que se envió a la Conselleria de Educación explicando lo sucedido, y pidiéndole que adopte una decisión al respecto. Es decir, el centro deja en manos de la Dirección Territorial la elección del acta sobre la que se debe basarse el modelo de jornada con el que va a trabajar el colegio durante este curso.

Los 19 nombres que fueron eliminados del censo de las votaciones corresponden a padres que aparecen por duplicado e incluso a alumnos, que nadie entiende por qué estaban ahí.

La Conselleria de Educación evitó valorar ayer la situación que se ha dado en el colegio de El Toscar, asegurando que estudiarán las alegaciones y la nueva acta durante esta semana, dentro del plazo establecido por la normativa para evaluar las reclamaciones que se presenten en toda la Comunidad Valenciana en torno a este proceso. Así las cosas, la decisión final sobre el modelo de jornada que se impone en el colegio El Toscar podría demorarse hasta el viernes 23 de septiembre, que es el plazo que se da la propia Administración autonómica para dar respuesta a todas las alegaciones presentadas estos días.