El objetivo es que no se repitan inundaciones en vías como Concepción Arenal, Sax, plaza de Madrid o avenida de la Comunidad Valenciana, por poner algunos ejemplos donde los peatones, los coches e incluso los autobuses de línea se veían desbordados por la cantidad de agua que no podía ser evacuada eficazmente en episodios de lluvias torrenciales.

Precisamente, para evitar esas imágenes de anegaciones, de daños por el agua, filtraciones y de limitar al máximo que la seguridad de las personas se vea comprometida, se llevan a cabo desde hace meses las obras del colector de Carrús, molestas para el peatón y el tráfico, pero, en los tiempos que corren, totalmente imprescindibles.

Una vez superado el punto crítico de cortar al tráfico la avenida de Novelda, algo que se produjo entre el 19 de julio y el 11 de agosto, la actuación continúa en su segunda fase, que afecta a la plaza de Madrid y sigue por las calles José Navarro Orts y Mario Pastor Sempere, para desembocar en la plaza de Barcelona.

Esta segunda fase, con un coste de 1,1 millones, arrancó el pasado 21 de abril y está programada que concluya el próximo 23 de septiembre, casi al mismo tiempo que comenzará la tercera de las cuatro fases que integran esta destacada actuación, impulsada por Aigües d'Elx.

Paralelamente, el próximo 12 de septiembre está previsto que se comience el asfaltado de las calles afectadas. Es más, esta actuación está permitiendo paralelamente mejorar las aceras, todo el perímetro de la plaza de Barcelona, así como las conducciones de abastecimiento, de manera que se han instalado unos 500 metros de nuevas tuberías de agua potable.

Aunque desde Aigües d'Elx preferían ayer no señalar todavía cuándo pueden estar terminadas las cuatro fases y, por tanto, todo el colector, sí avanzaban que la tercera fase se prolongará unas 13 semanas. Con una inversión próxima a los 870.000 euros, este nuevo tramo discurrirá, desde la plaza de Madrid, por las calles Pedro Moreno Sastre y José Moreno Orts.

En cualquier caso, una vez finalizados todos los tramos del colector, se recogerá una cuenca con una superficie de 123 hectáreas y la nueva capacidad permitirá conducir caudales superiores a los 10.000 litros por segundo en episodios de lluvias.

Las obras comenzaron en septiembre, en su día se anunció que culminarían a finales de este año o principios del próximo y que la inversión total aproximada para acabar con las inundaciones en Carrús rondará los 4,4 millones de euros.