Desobedecer la prohibición de bañarse en mar con bandera roja puede costarle a un turista de Logroño hasta 600 euros. La Policía Local de Elche impuso el pasado domingo por la tarde en Arenales del Sol la primera multa del verano a un joven por bañarse con bandera roja.

El joven, de 25 años, desobedecía las órdenes de los socorristas hasta que, tras ser conminado por los agentes, decidió salir del agua, según indicaron fuentes municipal. Al parecer, se trata de un turista originario de Logroño que se enfrenta a una posible multa de entre 300 y 600 euros por vulneración de la ordenanza de playas del Ayuntamiento de Elche.

Y es que los agentes de la Policía Local estuvieron invitando hace unos días a los bañistas a salir del agua por el estado de la mar y todos obedecieron sin causar ningún problema, según fuentes policiales, salvo la citada persona. Con esta tarea los agentes invitan a respetar la prohibición de bañarse para evitar ahogamientos y poner en peligro la vida de socorristas o agentes de la policía.

El concejal de Seguridad Ciudadana, José Pérez, responsable también del servicio de Socorrismo en las playas, invitó recientemente a los bañistas a respetar la bandera roja. «Las banderas rojas que prohíben el baño no se izan por capricho, sino por alertar del grave riesgo de entrar en el agua por corrientes, oleajes u otras circunstancias», declaró el edil.

A principios de agosto de 2016 el Ayuntamiento de Xàbia también impuso por primera vez una multa a dos bañistas por desobedecer la prohibición de bañarse con bandera roja en las playas. En esta localidad la sanción impuesta fue de 750 euros.