Radiales, taladradoras y hormigoneras han tomando las calles de Elche durante este mes de agosto. Aprovechando que la densidad del tráfico disminuye durante el mes vacacional por excelencia, por el éxodo de muchos vecinos que se trasladan a la costa o al campo, son muchas las zonas de la ciudad en la que estos días se ven aceras y calzadas levantadas, para acometer obras de todo tipo.

La renovación de canalizaciones para el suministro eléctrico, la sustitución de tuberías del agua y la instalación de colectores son las obras de mayor envergadura que se encuentran los vecinos que permanecen este mes en la ciudad de las palmeras. Pero también las hay menores que, aunque se culminan en pocos días, llenan las aceras de vallas y pasos peatonales alternativos.

Así, mientras unos ilicitanos descansan en la playa o el campo, los obreros se ponen el casco para aprovechar que las calles están más despejadas, de vehículos y peatones, y llevar a cabo obras que generarían más molestias en cualquier otra época del año.

«Todas las obras son incómodas pero a la vez necesarias», admitía la vecina María Antón, mientras pasaba por la calle Daoiz, donde una compañía eléctrica esta levantando varias calles para pasar una línea de media tensión bajo tierra. Esta vecina del centro de Elche explicaba que «suele ser habitual que se aprovechen los meses de verano en los que hay menos gente para hacer obras, pero siempre, por unas cosas o por otras, vemos que se están levantando las calles».

En la zona de la calle Blas Valero también se nota la presencia de los obreros. «A partir de las ocho de la mañana ya se empiezan a escuchar las máquinas trabajar, que no paran hasta por la tarde», explicaba Manuel Torres, otro vecino de la zona centro.

«Abres la ventana y escuchas las obras», comentaba la vecina Andrea Pérez, a la que no le hacía mucha gracia tener que soportar obras durante los meses de verano. «Como hace calor tengo que abrir las ventanas y el ruido de la obra no nos deja descansar estos días. Además, entra más polvo en casa», decía Andrea Pérez.

Pero las obras no se están llevando a cabo sólo en el centro de la ciudad, sino que llegan a un buen número de barrios. Un ejemplo es el caso de la zona de la plaza Barcelona, que está afectada por las obras del colector de Carrús Este, que está llevando a cabo Aigües d'Elx. Estas obras llegaron a afectar al tráfico de la avenida de Novelda, que tuvo que estar cortada unas semanas entre julio y agosto, pero estos días las obras se están centrando en las calles que rodean la plaza Barcelona.

Así, los vecinos de Elche que este año se han quedado en la ciudad pasando las vacaciones de verano son los que sufren la típicas molestias que van aparejada a cualquier obra, por pequeña que sea.