A vueltas con la falta de atención en el barrio Porfirio Pascual. Los vecinos de este enclave de la ciudad reclaman cuidados dirigidos, principalmente, para el entorno de la ladera del Vinalopó, a la altura del puente de Ferrocarril, y para el parque Fernández Ordoñez. Reivindican las mismas atenciones que en otras zonas de la ciudad, después de acumular durante años deficiencias y necesidades sin resolver, sobre todo, en los espacios verdes.
Y es que, aunque las brigadas de limpieza prestan servicio de forma puntual, (la última fue ayer), los residentes de la zona critican haber convivido durante días con un parque repleto de basuras generadas durante las fiestas. En esta línea, echan en falta una actuación a fondo para eliminar los cristales de las botellas y los residuos que se extienden en los márgenes del espacio verde, así como en la bajada al cauce del río. Un punto donde todavía permanecen numerosas cañas de cohetes, tanto de la Nit de l'Albà, como del castillo de fuegos artificiales del día 15.
Mezclados con los residuos, el exceso de matorrales y malas hierbas en el parque Fernández Ordoñez y en la bajada al Vinalopó también generan malestar entre los vecinos, al igual que las palmeras secas, y con peligro de caída, algunas de ellas atadas, desde hace meses, según denuncian los residentes. Junto a estas deficiencias, el pavimento de los juegos infantiles ha sido arrancado de su sitio y las planchas de caucho se amontonan por el parque.
Ante todo ello, los vecinos han reivindicado civismo a los jóvenes que habitualmente se reúnen en el espacio verde, pero también un mantenimiento más constante. De hecho, no es la primera vez que la asociación vecinal traslada sus necesidades al Ayuntamiento y a los responsables políticos, concretamente, de limpieza y jardinería. Asimismo, los residentes de Porfirio Pascual han insistido, también, en la falta de seguridad del parque Fernández Ordoñez, y y han reiterado la necesidad de instalar una barandilla protectora en semicírculo en las distintas alturas del enclave.
