El Paseo de la Estación y sus aledaños se convierten hasta el día 15 de agosto en el punto de reunión obligatorio para quienes quieren saciar su hambre durante las fiestas. Ya está en marcha el racó gastronómico municipal.

Muchos ilicitanos y visitantes esperaban con ansia la apertura de este espacio de degustación al aire libre, que reunió y reunirá a cientos de personas a mediodía. La fiesta se prolonga hasta bien entrada la tarde con incluso bailes y copas improvisados entre las barras del racó y la música que aportan varios restaurantes. La fiesta es el ambiente continuo en este espacio.

Veintiún restaurantes ilicitanos han decidido formar parte de este rincón de disfrute en el Paseo de la Estación, tres más que en el año anterior. Además, como es habitual, hay habilitadas cuatro carpas para las bebidas en el centro del racó. La afluencia ayer al mediodía fue bastante grande según los propios restauradores, que no daban abasto para repartir los platos de comida y llegaron a agotar muchas de las raciones antes de las 14.30 horas.

Los restaurantes hacen una parada técnica y vuelven a abrir a partir de las 20.30 horas en su formato nocturno. Esta vez no se ha habilitado el sistema de aspersores de agua que refrescaba el ambiente en las barras, pero eso no frenó ayer, aunque se echó en falta, a los asistentes, que recorrieron carpa por carpa para elegir la mejor ración.

Los racós de los medios de comunicación y el de la UMH también funcionan ya a todo gas. Este año la Universidad convertirá su tapa en solidaria y donará el dinero de los platos que vendan a la ONG Elche Acoge para colaborar a su adecuada integración en la ciudad.