El suelo de Traspalacio ha temblado este mediodía con la segunda mascletà de las fiestas. La Alicantina ha apostado por un espectáculo tradicional en el que ha combinado los terremotos con los disparos aéreos.

Con guiño al Elche, los colores franjiverdes han dibujado el cielo ilicitano. Los petardos han ido a más conforme avanzaba la cita con la pólvora. En total 90 kilos de material han hecho vibrar a un emocionado público, concentrado en los alrededores del Palacio de Altamira.

La tercera mascletá llegará mañana con Turis, en el mismo escenario, a las 14 horas.