Elche restringirá por primera vez el aforo de la ladera del río para ver el castillo de fuegos artificiales en la noche del 15 de agosto, festividad de la Patrona. La masificación de los últimos años y el consecuente riesgo de avalanchas ha llevado al Ayuntamiento y a la Policía Local a poner la lupa sobre la seguridad en el Vinalopó.

De esta forma, la cifra de personas que podrá disfrutar del espectáculo en la zona más próxima al puente del Ferrocarril- desde donde se lanzan los artefactos pirotécnicos- se reducirá en estas fiestas a una cuarta parte. Según el intendente jefe de la Policía Local, César Zaragoza, en los últimos años en el área próxima al lanzamiento del castillo se congregaban cerca de 8.000 personas y ahora este número se limitará a 6.000.

Así, el dispositivo de seguridad para este concurrido acto, que pone punto y final a las fiestas patronales, también se verá reforzado. En total, 66 agentes controlaran los accesos al cauce, concretamente en la zona comprendida entre el puente del Ferrocarril y el puente de la Virgen.

En este espacio, la Policía Local distinguirá zonas acotadas para el público que se irán completando progresivamente. «La idea es dejar libertad de movimiento y garantizar la seguridad en todo momento, así como favorecer la evacuación en caso de avalanchas, por lo que habrá tres espacios libres de público», explicó Zaragoza. Frente a ello, fuera de este perímetro, que corresponde a la zona de la ladera más alejada del lanzamiento del castillo de fuegos, no habrá restricciones, en cuanto al aforo, ya que tradicionalmente, la gente suele concentrarse en la parte más próxima al puente del Ferrocarril.

Para este año, aquellos que quieran presenciar el espectáculo pirotécnico en esta área acotada, tendrán que cumplir con seis normas básicas. En primer lugar, tendrán que seguir las instrucciones de la Policía Local y de Protección Civil para acceder al cauce del Vinalopó. Además, estará prohibido bajar sillas y mesas a la ladera, donde tampoco estará permitido llegar antes de las 19 horas.

Por otra parte, los asistentes no podrán tirar ningún producto pirotécnico y deberán cumplir con las zonas libres de público, además de aceptar el aforo establecido por el Ayuntamiento y no superar la capacidad fijada por los agentes.

Asimismo, otro de los objetivos que persiguen las nuevas medidas de seguridad es evitar la caída de las cañas de los cohetes cerca del público, por lo que la Policía Local establecerá una distancia de seguridad para garantizar la protección del público y evitar, así, cualquier accidente.

Tanto el edil de Fiestas, José Pérez, como Zaragoza, señalaron que cada año son más los ilicitanos y visitantes que se concentran en la ladera del Vinalopó para presenciar este espectáculo pirotécnico. «Esta creciente afluencia de público nos ha obligado a emprender acciones cuya finalidad es garantizar la seguridad del público», apuntó el concejal.

Desde el Ayuntamiento, y la Policía Local han pedido colaboración ciudadana para cumplir con las normas y han advertido que «no haber puesto en marcha estas medidas hubiera generado un problema de seguridad en la ladera».