La solución para acabar con uno de los problemas endémicos de la playa de La Marina ya está sobre la mesa. La Policía Local de Elche ha presentado en la úlima reunión municipal de Tráfico un proyecto que pondrá cerco a la saturación que cada verano se produce en las inmediaciones de este punto del litoral. El Ayuntamiento pretende limitar a 150 el número de vehículos que podrá acceder al aparcamiento próximo a la costa y, evitar así, la presencia de coches mal estacionados que entorpecen la circulación. Con ello, la cifra de turismos que tendrán la posibilidad de aparcar a pocos metros de la playa se verá tajantemente reducida con esta nueva medida.

Los motivos de seguridad son los que principalmente ha aludido el Consistorio ilicitano para poner en práctica esta ordenación del tráfico en La Marina.«No hay ninguna regulación en esta zona y eso ha llevado a tener problemas para el paso de los vehículos de emergencia, como la ambulancia y la Policía», explicó Héctor Díez, concejal de Tráfico.

En este sentido, desde el Ayuntamiento son conscientes de que la playa de la Marina suele tener remolinos, por lo que la presencia de los servicios de emergencia es habitual en este punto del litoral. Ahora, este proyecto, que tendrá que ser estudiado por los técnicos municipales y autorizado por Costas, supondrá una forma de restringir el volumen de tráfico en un paraje natural y la consecuente reducción del impacto sobre las dunas de la pedanía.

Con ello, la idea es ordenar los aparcamientos en batería y en fila y no permitir el estacionamiento de los coches fuera del área. Además, habrá señalización vertical para indicar el recorrido del carril de entrada y de salida. «Ahora mismo no hay ningún orden y, por ello, se habilitará un único sentido de circulación que recorrerá todo el parking», explicó Díez.

Otra de las actuaciones previstas consistirá en señalizar con cal las zonas de aparcamiento para que los usuarios se acostumbren a la nueva fórmula, ya que al tratarse de un espacio dunar no está permitida ninguna otra intervención. Por otra parte, el proyecto contempla pintar cuatro zonas reservadas para minusválidos y otra área específica para los vehículos de emergencia y el autobús.

Inmersos en plena temporada estival, el tripartito tiene previsto esperar a que llegue septiembre para acometer la reordenación del tráfico. «Somos conscientes del problema que hay y que lleva arrastrándose durante años, pero ahora no podemos dejar sin estacionamiento a los usuarios para hacer las obras, por lo que esperaremos a que acabe el verano», señaló el concejal del área.

Mientras, la Policía Local ha comenzado a encargarse ya de regular la circulación en los accesos de la playa ilicitana y en el aparcamiento para evitar que entren más coches de los que caben. Según indicaron desde el Ayuntamiento, el equipo de gobierno ha iniciado los contactos con los vecinos de la pedanía para comunicarles la futura actuación.