Un 9,8 es la nota media más baja te puedes encontrar entre los 16 estudiantes que participan, durante esta semana, en el Science Boot Camp que ha estrenado este verano la Universidad Miguel Hernández (UMH) para alumnos que acaban de cursar cuarto de la ESO y primero de Bachillerato de centros de diferentes puntos de España. A todos ellos los han becado para pasar esta estancia en el campus ilicitano y han sido seleccionados por su expediente. Un curso que evoca a ese espíritu de Silicon Valley al que cada vez más se intenta parecer este centro universitario repartido en diferentes puntos de la provincia pero con un común denominador: su apuesta clara por la tecnología y la investigación.

El vicerrector de Estudiantes, Francisco Moreno, recalcaba ayer cómo con este campus continúan con su política de captación de futuros grandes cerebros. De hecho, esta iniciativa se enmarca en su programa Promesas. «Este curso lo desarrollamos con el Centro de Investigación Operativa (CIO). Cuando nos planteamos hacerlo, pensamos en que versara sobre inteligencia artificial o ciberseguridad. Pero, finalmente, consideramos que aunque son unos portentos, no dejan de ser chavales, y que quizá el videojuego se les haría más sugerente, por lo que hemos optado por enseñarles a programar este tipo de entretenimiento», comentó.

El director del CIO, Federico Botella, señaló que van a introducirles en las tecnologías de interfaces de usuarios naturales, «que se basan en sustituir los dispositivos físicos -como los joystick- por los gestos, la voz o la mirada», explicó. Aunque en la UMH no hay una carrera específica sobre videojuego, «tenemos a profesionales en informática, nuevas tecnologías y cálculo», reseñaron.

Juan Carlos Sánchez es uno de estos alumnos con un expediente excelente. Su media es de 10, como la mayoría de sus compañeros. Sánchez enlazará este campus con otro sobre Física en Granada. Sin duda, una manera muy constructiva de pasar el verano. No obstante, este alumno viene ya con algunos deberes hecho puesto que, a pesar de su corta edad, está desarrollando sus propios videojuegos con tutoriales que encuentra por Internet. Lo dicho, un genio... entre genios.