La renovación parcial del barrio de San Antón, gobierne quien gobierne, parece la historia de nunca acabar. Durante el pasado mandato del PP, tanto en el Ayuntamiento como al frente del Consell, se dio por hecho que con los populares se conseguiría lo que se prometió en anteriores etapas socialistas y no se cumplió.

Ahora, con el PSOE y Compromís tanto en Valencia como gobernando en Elche, se calca el mismo discurso, asegurando que ellos sí cumplirán.

Así al menos lo dijo ayer la consellera de Vivienda y Obras Públicas, la socialista María José Salvador, quien se trasladó a Elche para firmar el enésimo convenio que afecta a la mencionada barriada y, de paso, visitar los pisos del primer bloque que inicia la regeneración de San Antón y que están prácticamente concluidos.

«Nos comprometimos y cumplimos», señalaba ayer Salvador, poco después de firmar el convenio por el que la Generalitat Valenciana invertirá 7.263.200 euros en este proyecto, según fuentes municipales. «El total de la inversión prevista para la rehabilitación de este barrio asciende a 20.876.072 euros y contempla la construcción de cuatro nuevos edificios de viviendas, con 308 pisos», señalaban ayer desde el Ayuntamiento.

Pero no está claro aún si la primera fase de esta regeneración urbana integra cuatro o tres edificios, como tampoco cuándo puede estar definitivamente concluido todo el paquete de viviendas, una actuación que, en cualquier caso, los vecinos llevan esperando más de dos décadas.

De momento, ya hay un primer bloque prácticamente terminado. El Gobierno central y la Generalitat Valenciana costean dos terceras partes de las viviendas, mientras que los vecinos tendrán que aportar su inmueble que dejan en San Antón, así como entregar entre 15.000 y 30.000 euros (IVA incluido).

El alcalde de Elche, Carlos González, recordó que este mes de julio se aprobará el pliego de condiciones para la comercialización de las viviendas de este primer bloque y que, seguramente, antes de que finalice el presente año se estarán suscribiendo los contratos de compraventa.

Además, está previsto que en breve se licite el segundo de los bloques, el cual acaba de salir a concurso este fin de semana en el Diario Oficial de la Unión Europea. «Se trata de 124 viviendas, otro gran impulso a un proceso de modernización de un barrio que necesitaba de la inversión pública», añadía el primer edil.

Por su parte, el concejal de Urbanismo, José Manuel Sánchez, apunta que está previsto que las obras del segundo bloque arranquen en octubre o noviembre de este mismo año.

Culminación

Así, con ambas edificaciones, la suma de pisos asciende a 198, por lo que todavía faltarían otras 110 viviendas para culminar esta primera fase de la regeneración de San Antón de 308 viviendas.

Y aquí es donde empiezan de nuevo las dudas. Por un lado, unas fuentes apuntan que se levantarán otros dos edificios, pero otras señalan que solo será necesario un tercer edificio. De igual modo, se están barajando hasta cinco solares distintos donde desarrollar las viviendas que faltan.

En cualquier caso, todo apunta a que esas 110 viviendas que faltarían no estarán terminadas seguramente para 2017, aunque ya se esté trabajando en los trámites. En este punto cabe recordar que la regeneración de San Antón y las ayudas del Ministerio de la Vivienda se incluyen en el Plan Estatal de Vivienda 2013-2016, lo que obliga, para obtener los fondos de Madrid, a tener terminados los edificios subvencionados antes de 2018.

Fuentes municipales consideran, no obstante, que las 110 viviendas pendientes se podrán culminar en 2018 o incluso más adelante y que para ello el Ejecutivo central no debería poner ningún objeción y, por tanto, sí permitiría prorrogar el plazo o incluir las ayudas por entregar en un nuevo plan estatal de vivienda.

Sea como fuere, de momento lo que sí está claro es que, de nuevo, se avistan nuevos atrasos y los vecinos continúan sin fiarse de las promesas de los políticos.

«Proyectos como el que desde la Generalitat iniciamos hoy en el barrio de San Antón demuestran nuestro compromiso por mejorar la calidad de vida de las personas». Así se expresaba la entonces consellera de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, Isabel Bonig, -en idéntico tono que el de su sucesora ayer- en la colocación de la primera piedra que daba inicio a la renovación del barrio. Esto ocurría nada menos que el 7 de julio de 2011, al poco de llegar Mercedes Alonso a la Alcaldía.

Pocos días después, pero en ese mismo mes, el equipo de gobierno llegaba a anunciar incluso que los «cinco» primeros bloques de San Antón deberían estar listos antes de finalizar 2014.

El 26 de diciembre de 2014 Alonso volvía a colocar otra «primera piedra» en otro solar distinto, donde finalmente sí se ha levantado el primer edificio que ahora está a punto de entregarse.

De ahí la historia de nunca acabar, lo que ha llevado a los vecinos, y con razón, a desconfiar de las numerosas promesas de los políticos en los últimos veinte años.