Vecinos y comerciantes de Arenales del Sol realizarán mañana una protesta por la paralización de las obras del hotel. Una gran parte de sus comerciantes cerrarán su negocio durante una hora para acudir a la concentración que ha organizado la asociación de vecinos frente al edificio del hotel, a las 10 de la mañana.

Durante esa hora los vecinos, comerciantes y antiguos trabajadores del hotel, junto a sus familias, estarán frente al hotel para protestar por la paralización y pedir a las administraciones públicas colaboración para que el proyecto del complejo siga adelante.

El presidente de la asociación de vecinos y organizador de la protesta, Fernando Cano, asegura que el proyecto del hotel «traerá en cascada una serie de beneficios», entre los que destaca «una mayor actividad económica con creación de empleo, mejora en los servicios, mejora del transporte y comunicaciones, instalación de nuevos negocios y una revalorización de la zona de sus comercios y sus viviendas».

Los comerciantes creen que teniendo un hotel cerca del aeropuerto y en una zona turística, supondrá beneficios para sus negocios y atraería a la pedanía a visitantes extranjeros y nacionales en cualquier época del año.

El alcalde pedáneo, Alejandro García calificó la iniciativa como aceptable porque, según opina, necesitan la continuidad de una obra que será el motor de la actividad económica de Arenales. García confiesa estar indignado porque el proceso sigue paralizado y no han tenido una nueva noticia desde que Costas llevará a cabo actuaciones ante lo que considera unas obras que se extralimitado del permiso de rehabilitación concedido. Asimismo, asegura que el alcalde ilicitano comunicó a la asociación de vecinos que está en contacto con Costas para aclarar esta situación. García anunció que también estará presente en la protesta y que espera que se unan aún más comercios porque «de la continuidad de las obras depende la dinamización de la economía de Arenales».

Cano solicitó la semana pasada el permiso para realizar la protesta en la Subdelegación del Gobierno y, ante el silencio administrativo, entienden que tienen permiso para organizar la concentración. Además, de momento no descartan volver a organizar pronto nuevas protestas.