La Comunidad Valenciana está a la cola en cuanto a la atención que reciben los pacientes infartados. Concretamente, la tasa de mortalidad intrahospitalaria por riesgo en el infarto agudo de miocardio sitúa a la Comunidad en el puesto trece, que comparte con Canarias, sólo por delante de Cantabria, Extremadura y La Rioja. En el resto de regiones la probabilidad de supervivencia ante un infarto es mayor, según un informe de la Sociedad Española de Cardiología.

Los expertos coinciden en que en España las probabilidades de morir por un infarto aumentan o disminuyen en función de la comunidad autonómica de residencia. Y así se refleja en la tasa de mortalidad que maneja la Sociedad Española de Cardiología, que apunta que la mayor esperanza de vida se tiene en Baleares y Madrid, donde la tasa de mortalidad está en el 6,2% y 6,4%, respectivamente. La tasa de la Comunidad Valencia está en el 7,9%.

Los datos reflejan que la Conselleria de Sanidad debe mejorar el protocolo del «código infarto», que establece una serie de dispositivos que se activan cuando un paciente que entra en contacto con algún punto de la red asistencial es sospechoso de sufrir un infarto. De entrada, se establecen hospitales de referencia en atención de infartos y a cada uno se le asignó una zona del territorio. Así, cuando cualquier médico considera que un paciente es candidato a reperfusión inmediata, lo deriva automáticamente al centro de referencia que le corresponde en función del lugar donde se encuentre.

El objetivo del código infarto siempre es prestar atención sanitaria especializada entre, como máximo, 90 y 120 minutos desde que un médico realiza el diagnóstico del infarto.

En el sur de la provincia el hospital de referencia para atender a estos paciente de lunes a viernes por las mañanas es el Hospital General Universitario de Elche. Fuera de ese horario los pacientes deben ser remitidos al Hospital General de Alicante, que dispone del servicio de hemodinámica los siete días de la semana las 24 horas, al igual que el Hospital de Sant Joan, el otro de la provincia acreditado para atender las 24 horas del día. Por este motivo, expertos apuntan a la necesidad de que una zona como Elche cuente con el servicio 24 horas.

En la comarca del Baix Vinalopó, el Hospital del Vinalopó puso en marcha una unidad de hemodinámica 24 horas el pasado mes de octubre, pero la Conselleria de Sanidad la desautorizó pocas semanas después, alegando que el centro no contaba con las acreditaciones necesarias para prestar el servicio. La Administración autonómica tomó esta decisión pese a conocer que la Comunidad Valenciana está a la cola en cuanto a la atención de pacientes infartados, cuya asistencia sanitaria debe realizarse lo antes posible. Y es que varios expertos consultados por este diario insisten en que cuando se atiende a un paciente de estas características «no sólo es importante que se practique una angioplastia, sino también hacerlo rápido, en un máximo de 90 a 120 minutos desde que se diagnostica el infarto».

Los mismos expertos apuntaron que trasladar a un paciente desde localidades del sur, como Torrevieja o Pilar de la Horadada, hasta Elche, ya supone una demora de entre 70 y 80 minutos, por lo que no entienden los motivos por los que la Conselleria de Sanidad desautorizó a Elche prestar el servicio de hemodinámica las 24 horas del día, todos los días de la semana.