Casi 800 propietarios de fincas o construcciones en zona rústica van a abonar menos este año por el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) en Elche. ¿El motivo? La revisión que acaba de llevar a cabo la Dirección General del Catastro tras afinar y diferenciar con mayor exactitud sobre qué tipo de suelo se asientan determinadas propiedades en el municipio ilicitano.
La concejal de Hacienda, Ana Arabid, explica que tradicionalmente determinados inmuebles o parcelas han venido abonando el IBI por encontrarse en lo que se conoce como suelo «urbanizable programado», es decir, en zonas rústicas sobre las que estaba previsto que «en breve» se acometiera un ordenamiento plenamente urbano.
Esto se traducía, a la hora de contribuir con los impuestos, en que tributaba de antemano como urbano un inmueble o una parcela que, no obstante, se encontraba todavía en suelo catalogado como rústico.
Este agravio es lo que se ha venido a resolver en cierta medida gracias a la revisión que ha acometido el Catastro y que, de cara a los contribuyentes beneficiados, se traduce en un descenso considerable a la hora del abono del gravamen.
Los trámites comenzaron durante el verano del pasado. El Ayuntamiento, asegura la titular de Hacienda, se puso las pilas nada más hacerse cargo del Gobierno local y recopiló y facilitó toda la documentación al respecto durante el estío «a fin de que el Catastro lo revisara lo antes posible».
Aquel trabajo se ha permitido ahora que el Catastro haya modificado y revisado la cuota a pagar por parte de 789 unidades catastrales, las cuales van a ver reducido su recibo anual desde el presente ejercicio.
Menor recaudación
Esto se va a traducir, no obstante, en no muy buenas noticias para la Administración local, ya que, según los cálculos de la Concejalía de Hacienda, esto va a significar una disminución de los ingresos previstos en 132.131,87 euros.
En la inminente campaña del Impuesto de Bienes Inmuebles en Elche correspondiente este año, aquellos propietarios beneficiados a raíz de esta revisión catastral que dispongan de finca rústica y de vivienda levantada en ella, recibirán dos recibos por separado y diferenciados.
Arabid pone como ejemplo el caso de un propietario que el pasado año tuvo que abonar 350,39 euros por una parcela en suelo rústico y que, este año, tan solo tendrá que hacer frente a 22 euros (-328 euros).
De igual modo, pone un segundo ejemplo de parcela e inmueble levantado dentro del recinto. En este caso, el dueño, que en 2014 pagó 597,61 euros, durante el presente ejercicio tendrá un recibo de 95,04 euros por la construcción, que se considera urbana, y un segundo recibo por el solar, calificado como rústico, de 22,09 euros. Esto no garantiza que todos los casos vayan a ser así, pero da una idea de cómo puede haberse alterado la situación tras realizarse la oportuna revisión catastral.
Desde el equipo de gobierno se apunta que las 789 unidades catastrales alteradas se encuentran en partidas rurales como por ejemplo La Marina o El Altet, aunque también afecta a algunas urbanizaciones.
«La implicación del Ayuntamiento de Elche desde el minuto uno ha sido muy importante», subraya la edil de Hacienda, quien apunta que todo esto tiene su origen en la modificación de la Ley del Catastro Inmobiliario de junio de 2015.
La Dirección General del Catastro ya está remitiendo las cartas informativas a los interesados, algunos de los cuales también se están acercando hasta el Ayuntamiento para recibir información.
El Consistorio ilicitano espera ingresar en este 2016 cerca de 56 millones con cargo al IBI, un impuesto que este año tiene como periodo de cobro establecido del 25 de julio al 3 de octubre.
