«El grado de deterioro de la estructura del mercado lo hace insalubre en todo el aspecto, con riesgos graves de aparición de plagas y que dificulta que los puestos que están activos puedan garantizar el no atentar contra la salud pública».
Con estas palabras concluye y describe la Conselleria de Sanidad el estado del viejo Mercado Central de Elche, un inmueble sobre el que, desde antes de las pasadas elecciones municipales, confluyen dos posturas muy claras y antagónicas: los que están a favor de su rehabilitación y los que apuestan por su demolición y la construcción de un nuevo concepto de mercado privado, incluido un gran aparcamiento subterráneo
El último informe -al menos del que tenga constancia el Ayuntamiento de Elche- elaborado por la Conselleria de Sanidad acerca del Mercado Central, deja al descubierto algunos aspectos a priori preocupantes porque, no hay que olvidar, que se trata de un espacio donde se venden alimentos al público.
En este sentido, en el acta levantada por el inspector de la Conselleria de Sanidad se enumeran una serie de situaciones en principio nada deseables y que hablan de aspectos a mejorar en este inmueble.
Así, por ejemplo, se advierte de la situación de «puertas y ventanas abiertas al exterior permanentemente y sin protección o barreras que impidan el acceso de insectos y animales al interior del mercado».
También se recoge en el acta el hallazgo de un «arcón frigorífico semiabierto, abandonado en un puesto vacío, con restos de material orgánico en su interior, deteriorados completamente y con derrumbe», así como el hecho de que el habitáculo para el depósito de basura esté «deteriorado completamente, tanto de suelo del techo y en desagüe».
En su inspección, el técnico detecta también la presencia de aves en el interior, en concreto gorriones; que los aseos carecen de agua caliente y de secamanos higiénico; y que existen algunas paredes deterioradas en desuso e, incluso, las de algunos frontales de puestos en uso.
«Foco de contaminación»
El informe sanitario prosigue advirtiendo de la existencia de puestos «vacíos y destruidos interiormente y abiertos a los pasillos a otros puestos que sí están en funcionamiento, pudiendo ser foco de contaminación para el resto del mercado».
Techos rotos, falta de placas de escayolas o suelo deteriorado que dificulta la limpieza son otras de las consideraciones que se apuntan en el acta oficial.
Al margen de las anotaciones hechas a mano por el agente de control de la Conselleria, el formulario de inspección incluye un apartado en el que cabe marcar varias casillas acerca de si se está conforme o no con respecto a condiciones estructurales y de ubicación, equipos, servicios, desperdicios o control de plagas.
Sobre estos dos últimos aspectos, la inspección marca la casilla de no conforme en lo referente al estado higiénico. Y hace lo propio cuando evalúa el epígrafe de focos de contaminación en las proximidades, lavamanos, suelos, paredes, techos, puertas, ventanas y huecos al exterior. No obstante, sí da su conformidad al diseño general de la estructura, los servicios sanitarios, los equipos y en lo referente al suministro de agua.
Fuentes de la Conselleria de Sanidad apuntaban ayer la posibilidad de que lo contenido en este informe, de fecha 4 de febrero de 2016, se haya podido subsanar ya por parte del Ayuntamiento de Elche.
Reacción municipal
El concejal de Sanidad, Carlos Sánchez, explicaba ayer, por su parte que, nada más recibir el informe, se pusieron manos a la obra para conocer de primera mano las cuestiones que se identificaron por parte del técnico oficial.
«Se ha actuado en el tema de limpieza y de iluminación», señala el edil, para reconocer seguidamente que en lo que concierne a la propia construcción «no se ha actuado». En este sentido, recuerda que realizar obras en el propio edificio supone una inversión muy importante.
Incluso hubo pequeñas actuaciones que se valoraron pero que, al alcanzar la cifra de 5.000 ó 6.000 euros, al final tampoco pueden ser asumidas por el Ayuntamiento.
En cuanto a la anotación del inspector de la existencia de accesos abiertos permanentemente y sin protección o barreras, el titular del área aclara que el viejo Mercado Central de Elche carece, dadas sus características, de puertas físicas de entrada, algo que ocurre en otros muchos mercados
Carlos Sánchez insiste en que se abordó en su día con el servicio de limpieza extremar totalmente la higiene. «Lo que ocurre es que el edificio es muy antiguo y parece sucio, pero lo que hemos hecho ha sido realizar una limpieza más exhaustiva para que no haya plagas», dijo.
