El equipo de gobierno tiene previsto modificar la actual ordenanza de limpieza, que data de marzo de 2003 y que se modificó en noviembre de 2007. Aún así, se ha quedado trasnochada para hacer frente, por ejemplo, a los excrementos y orines de las mascotas. El edil Héctor Díez señala que en otros municipios se han producido actualizaciones, pero no en Elche. Así las cosas, el Ayuntamiento va a llevar a cabo este año una revisión general de la ordenanza, de manera que se incluyan más artículos específicos sobre cómo proceder en los espacios públicos con respecto a las deposiciones de los perros. El titular de Vía Pública explica que la normativa tiene, por ejemplo, que incluir dónde pueden defecar los animales, como en los pipicanes o en los imbornales. De igual modo, gracias a las modificaciones, el trabajo de vigilancia y sanción de la Policía Local podría ser más efectivo. Actualmente, los agentes multan siempre que se coja «in fraganti» al dueño que no recoja los excrementos. J. M.