La Asociación de Afectados por el Ruido de Elche anunció el pasado mes de abril que iba a recurrir ante el Tribunal Supremo dos sentencias del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV) que les quitaba la razón, parcialmente, a dos impugnaciones contra las ordenanzas del ruido y de actividades económicas que presentaron en 2012 y 2013. Y fue «parcialmente» porque la sentencia del TSJCV sobre la normativa del ruido estimaba solo una parte de su queja. La ordenanza exige dos mediciones acústicas, una previa y una posterior, para comparar el ruido con el emisor acústico parado. Según la asociación, eso elimina el efecto sorpresivo y hace la media menos efectiva. Lo que baraja ahora la Asociación Empresarial de Restauración y Afines de Elche (Aserae) es personarse como parte interesada. «No lo haríamos con el fin de entorpecer el objetivo que persiguen desde la agrupación vecinal, sino para aportar nuestro punto de vista y porque nos compete», apunta el secretario de Aserae, Julio Giménez. s. i.
