La edil de Turismo, Mireia Mollà (su partido, Compromís, ya dejó claro en su día que no quería reabrir el hotel en primera línea, sino en otro punto de Arenales), tachó de «llamativo» que Costas no hubiera tenido la «deferencia» de informar previamente de la paralización de las obras al Ayuntamiento (algo que finalmente hizo ayer poco antes de las 13 horas) y no tuvo más remedio que reconocer, al igual que el edil de Urbanismo, que se habían enterado por INFORMACIÓN. «Pido que se esclarezca y recomponga la normalidad de una obra en condiciones», dijo la concejal, quien apeló a una rehabilitación que sea «del todo garantista y que cumpla con los requisitos que marca el Estado». J. M. G.